POR MANUEL JIMENEZ
El presidente Leonel Fernández recibió ayer, en el Palacio Nacional, el Plan de Seguridad Democrática, a través del cual las autoridades buscan coordinar acciones represivas y educativas para enfrentar el auge del crimen, la delincuencia y el narcotráfico, así como fortalecer a la Policía con equipos y sofisticadas técnicas de investigación.

Al recibir el documento, en una ceremonia en su despacho, el Presidente Fernández dijo que se trata de un trabajo consensuado que servirá de marco y de guía a las acciones que deberá tomar el gobierno para la prevención y el combate de la delincuencia y el narcotráfico en la República Dominicana.

El plan fue entregado al mandatario por una comisión integrada por el secretario de Interior y Policía, Franklin Almeyda Rancier; el jefe de la Policía Nacional, mayor general Manuel de Jesús Pérez Sánchez; el procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito y el director del Departamento Nacional de Investigaciones (DNI), mayor general Damián Castro Cruz. Figuró también el comisionado para la Reforma y Modernización del Poder Judicial, Moscoso Segarra.

Almeyda Rancier, al término del encuentro que se extendió por unos 40 minutos, rehusó ofrecer detalles en torno al contenido y las metas del Plan de Seguridad, pues de esto hablará en su momento el presidente Fernández, quien debe dar la aprobación final.

El procurador general,  Domínguez Brito, entrevistado también en el Palacio Nacional, destacó la “gran preocupación” que tienen las autoridades ante el hecho de que el índice de criminalidad aumenta un punto y algo más cada año.

Dijo que la preocupación de las autoridades no es tan sólo por el auge del narcotráfico, los secuestros, asaltos, crímenes y las pandillas, sino también por la violencia intrafamiliar, las muertes por asuntos pasionales y otras manifestaciones de intolerancia.

Destacó que cada mes se registran 40 y 50 casos de rencillas personales en los que la gente lo primero que hace es tomar un arma y matar al otro.

 “Todo esto evidencia que falta mucha madurez en el manejo de una crisis, A veces esto se da hasta por un accidente de vehículo”, dijo.

No obstante, Domínguez Brito consideró que la violencia que se registra en la nación no ha alcanzado la gravedad de otros países, especialmente en muchos de Centroamérica.

El funcionario explicó que en el Plan de Seguridad Democrática se contemplan campañas de educación al ciudadano, así como un programa para la rehabilitación de reclusos en cárceles que serán tomadas como piloto en la capital y el interior.

En este programa entrarán inicialmente diez cárceles, pues el objetivo es enviar a la calle un ciudadano nuevo al cumplir su condena, dijo el funcionario.

Manifestó que en la actualidad el índice de criminalidad es de 21 por cada 100,000 habitantes, pero que cada año viene aumentando un punto y algo.

Dijo que si a esto se agregan los casos en legítima defensa, en intercambio de disparos con las autoridades, la tasa subiría mucho más, algo que consideró “muy preocupante”.

EL PLAN

En la estructuración del plan cooperaron organismos del Estado y de la sociedad civil, así como entidades internacionales.

“Ha sido un trabajo de varios meses, abordando propuestas que sean realizables”, explicó Domínguez Brito.

Dijo que la idea es buscar respuestas razonables de acuerdo con los niveles nacionales de educación, de los problemas de pobreza y que no es para que haya una solución en dos meses.

Aunque se cuidó de no fijar plazos, el procurador general de la República dijo que en lo que se refiere al control de la delincuencia en los barrios “esperamos que antes de diciembre podamos tener buenos resultados”.

Dijo que otra parte importante del plan es reducir los niveles de impunidad que muchas veces se da en la justicia, de gente que esta en libertad bajo fianza y nadie le da seguimiento, hasta lograr que haya la sanción correspondiente.

“Hay que trabajar también toda la parte de prevención en materia de droga”, dijo.

La puesta en marcha del plan será respaldada con un crédito por US$125 millones que el gobierno gestiona ante el Eximbank, de los Estados Unidos, para adquirir equipos motorizados para la Policía, computadoras y cuatro laboratorios científicos.

Previo a la ceremonia de entrega del plan al presidente Fernández, el doctor Almeyda Rancier ratificó que en el presupuesto de la Policía de este año están consignados los recursos para aumentar de manera sustancial el salario de sus miembros.

Con el aumento, un raso pasaría a ganar RD$6,500 mensuales y en lo adelante se establecería una escala de incrementos por rango hasta llegar al jefe de la Policía, cuyo sueldo será de RD$100,000 mensuales, dijo Almeyda.

El jefe de la Policía, mayor general Pérez Sánchez, rehusó hablar a la prensa.