POR MANUEL JIMÉNEZ
El presidente Leonel Fernández dijo ayer que el país tiene que pasar ya a la acción con la implementación de medidas que demanda el Plan Nacional de Competitividad para colocar a los sectores productivos en condiciones de acceder en buena lid al tratado de libre comercio con Estados Unidos y Centroamérica (DR-CAFTA).

Fernández, quien habló en el Palacio Nacional en una reunión  de evaluación del desempeño del Consejo Nacional de Competitividad, reconoció que este tratado “no es una panacea” para República Dominicana, sino tan solo “la boleta de entrada al juego”.

“Hoy en día la idea no es ir al muro de las lamentaciones, sino tener un plan nacional de cómo sacarle provecho a las nuevas oportunidades que se crean y cómo disminuimos los efectos negativos que también vamos a tener”, expresó el gobernante.

En la reunión, celebrada en un salón de la tercera planta, estuvieron  el vicepresidente Rafael Alburquerque; el secretario de Industria y Comercio, Francisco Javier García Fernández; presidente del Consejo y el secretario ejecutivo, Andrés Vanderhorst hijo; así como otros funcionarios públicos y representantes del sector privado.

En el desarrollo de la reunión hubo exposiciones del propio Vanderhorst hijo en torno a los logros e iniciativas de este organismo en el período 2004-2006; del doctor Antonio Isa Conde, asesor industrial del Poder Ejecutivo y miembro del consejo; asistido por la argentina Marcela Escobari, quien reveló datos de una encuesta al sector empresarial.

Expuso también el mexicano Andrés Villarreal, presidente del Instituto de Competitividad Sistémica y Desarrollo, quien presentó un plan nacional en este orden.

“Ahora lo que hay es que concretarse en la idea de cómo podemos tener en un plazo relativamente breve el plan de acción para poder trabajar de manera más eficaz y más directa con cada una de las áreas que hemos escogido como modelo para el Plan Nacional de Competitividad”, expresó Fernández

Dijo que se sentía satisfecho  de que en el país se ha comprendido que “estamos en una nueva etapa, que suscribimos este acuerdo de libre comercio y que entra en vigencia el primero de julio de este año”, pero advirtió que se debe comprender también “que esto no es la panacea, sino tan solo la boleta de entrada al juego”.

Fernández dijo que en este Plan Nacional de Competitividad se han tomado como modelos sectores como el turismo, la agroindustria y el desarrollo de la tecnología por entender que este es el camino que República Dominicana debe emprender.

Reconoció que los resultados de este proceso no se verán en un periodo de gobierno,  aunque tal vez comiencen a percibirse en dos, pero “hay que tener una visión del largo plazo que se requiere para transformar una nación “.

El Presidente defendió sus viajes al exterior, así como los que realizan otros funcionarios del gobierno y recordó que República Dominicana era hasta hace poco un país “internacionalmente aislado” y es ahora cuando recién se incorpora a los foros internacionales. Esto significa que vamos abriendo caminos”, dijo.

“Si de lo que se trata es efectivamente de crear una cadena de valor con vinculación al exterior, eso no ocurre estando anclado en la República Dominicana, eso hay que salirlo a buscar. Eso explica de alguna manera los viajes presidenciales y la actividad que lleva a cabo la Cancillería de la República y todo el sector del gobierno dominicano que se vincula con el exterior”, agregó.

Puso los ejemplos de los secretarios de Turismo, que debe estar presente en todo lo que significa promoción en el exterior de la República Dominicana, o el de Medio Ambiente que recién acaba de asistir a una cumbre mundial sobre el agua en México.

Citó también el caso del director del Centro de Inversión y Exportación (CEI-RD), Eddy Martínez, quien viajó recientemente a la India donde el país se promueve como centro para la instalación de Call Center y tratar de conectarse para desarrollar la industria cinematográfica, es decir la parte digitalizada de post producción.

Mencionó también los logros de su reciente viaje a Inglaterra, donde descubrió a inversionistas británicos interesados en construir hoteles y otras infraestructuras turísticas, se firmó un acuerdo de cielo abierto que permitirá a las líneas aéreas británicas iniciar vuelos regulares al país, dando facilidades a los 300 mil turistas ingleses que anualmente viajan a esta nación del Caribe.

PLAN PILOTO

Fernández dijo, además, que en ese viaje pudo tener una versión inglesa de la crisis energética dominicana y se discutió la posibilidad de implementar aquí un plan piloto para combatir el robo de la electricidad a través de la colocación de medidores prepagados. Destacó que un plan similar tuvo éxito en el África.

“La conexión directa con el mundo es un estímulo y un incentivo continuo a la innovación intelectual que es la base para la transformación”, aseguró Fernández.

Insistió en que el DR-CAFTA presenta oportunidades y desafíos para la República Dominicana, pero de lo que se trata es de disminuir los impactos negativos que inevitablemente vendrán.