El Presidente de la República, doctor Leonel Fernández, visitó ayer la clínica Corazones Unidos, ubicada en la cercanía de su residencia, donde fue sometido a chequeos médicos “rutinarios”. Un galeno dijo que se trataba de un chequeo  anual que el mandatario se hace, pero esta es la primera vez que se conoce de esta práctica. Este diario supo, en fuentes médicas, que al doctor Fernández le practicaron una prueba de esfuerzo.

El presidente Leonel Fernández permaneció ayer varias horas en el Centro Médico Corazones Unidos, en el ensanche Naco, donde se hizo un chequeo médico que estuvo a cargo del cardiólogo  Gustavo Rojas.

Según se informó, el presidente Fernández habría llegado a Corazones Unidos  las 9:30 de la mañana y permaneció hasta después del mediodía.

A su salida del centro médico, el mandatario estuvo acompañado por el doctor Rojas, quien   declaró que se trataba de un chequeo de rutina.

El galeno explicó que el presidente  Fernández cumplía con una visita que hace anualmente a Corazones Unidos y   afirmó que el mandatario goza de muy buena salud.

Antes de que el presidente abandonara Corazones Unidos, una fuente que tiene acceso a  las áreas del centro médico dijo a reporteros de este diario que el primer mandatario estaba siendo sometido a una “prueba de esfuerzo” y  aseguró que esta es la tercera vez que el mandatario se hace ese tipo de chequeo médico.

La visita al médico se llevó a cabo de manera muy discreta, con poca escolta y sólo dos yipetas, en una Lexus que utiliza el Presidente de la República y otra del Cuerpo de Ayudantes Militares.

En la sala de recepción del Centro Médico esperaban dos ayudantes militares vestidos de civil que acompañaron al presidente Fernández.

El jefe del Estado reside a pocas cuadras de Corazones Unidos, ubicado en el ensanche  Naco.

En la agenda del Palacio Nacional no se contemplaba ninguna actividad para el día de ayer.