Julián Alberto Jiménez Monsalve, conocido como Machete, es catalogados por las autoridades colombianas como un peligroso jefe de sicarios causante de decenas de asesinatos.

“Machete” de 32 años de edad, era el principal actor generador de violencia en Medellín, tiene una trayectoria criminal de 15 años, y a su vez es desmovilizado del bloque “héroes de granada” de las extintas autodefensas unidas de Colombia con injerencia en la comuna San Javier (13), pasando a integrar “la oficina”, como articulador de narcotráfico.

En el año 2011, es sindicado por las autoridades por el delito de terrorismo y homicidio; en el 2013 asume como emisario de “Carlos Pesebre” (capturado); del mismo modo en el 2014, es señalado por el delito de desplazamiento forzado de varias familias en la comuna San Javier; y a partir del 2017, asume como máximo cabecilla del grupo de delincuencia organizada “Robledo”, confrontando a otras organizaciones delincuenciales y dirigiendo múltiples actos violentos, hecho por el cual se le atribuyen por lo menos 43 homicidios en la Comuna 13.

A Jiménez Montasalve se le acusa de liderar el negocio del narcotráfico desde República Dominicana, a donde logró ingresar haciéndose pasar por un ciudadano venezolano.

«Mientras él vivía como un rey en República Dominicana, impartía órdenes para que los jóvenes de las bandas se mataran entre ellos y le quitaran la vida a los demás. Este es el vivo ejemplo de que a estos jefes de estructuras criminales no les importan sus vidas ni las de sus familias», afirmó el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez.

Machete se encontraba en el cartel de los más buscados de Medellín y por él se ofrecía una recompensa de 6.387 dólares.

Machete

Sobre su apresamiento.La Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, a través de la Dirección de Inteligencia Policial (DIPOL) en apoyo de la Fiscalía General de la Nación e INTERPOL, y en coordinación con autoridades de República Dominicana, logró la expulsión de ese país de “Machete”, máximo cabecilla del grupo delincuencial «Robledo”, haciendo posteriormente efectiva su captura, una vez llegó a Colombia.

La operación oficial se desarrolló en el país de República Dominicana, puntualmente en un exclusivo sector de la ciudad de Punta Cana, sitio donde se hacía pasar como un próspero ganadero y donde se encontraba huyendo de las autoridades colombianas desde el año 2015.

Según las investigaciones, “machete” adquirió una identidad falsa venezolana, con el nombre de José David Mateo, con el fin de nacionalizarse en República Dominicana donde residía, y donde coordinaba actividades de narcotráfico desde la Costa Caribe colombiana a Centroamérica en conexión con cárteles mexicanos.

A su vez constantemente cambiaba su apariencia física y nunca realizaba viajes directos desde República Dominicana hacia Colombia (buscando con esto distraer las autoridades) a donde se desplazaba con el fin de seguir coordinado acciones criminales.

Jiménez actualmente presentaba orden de captura vigente por los delitos de homicidio y concierto para delinquir agravado con fines de homicidio, porte ilegal de armas, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes y extorsión.