¿Les digo Algo?

¿Les digo Algo?

“Viola y estrangula niña de dos años”, “Prende fuego a ex pareja y esposo”, “Mujer de 63 años violada y asesinada”, rezan titulares de prensa sobre casos de violencia contra la mujer que ocurren diariamente en este país, que ha escalado a las posiciones cimeras entre los países donde los hombres y el mismo Estado consideran a las mujeres ciudadanas de segunda categoría, responsables del mal trato y los vejámenes que reciben.
Estos titulares denuncian los abusos contra mujeres, niñas y niños reseñados en diferentes países como Italia, donde se publicó: “Niña 11 años grabó como era abusada por un sacerdote para que le creyeran”; en Argentina, “una monja seleccionaba niños especiales para ser abusados por curas”; “niña dominicana teme su madre le pegue si se entera que el padrastro la manoseaba o violaba”, se escucha en un video grabado por un vecino y difundido en las redes sociales.
En América Latina hay un enorme vacío en la creación de políticas para abordar la violencia de género, la violencia intrafamiliar, el abuso infantil, las violaciones y la discriminación con criterios sociológicos fundamentados que induzcan a la población a una convivencia en paz y seguridad.
Un estudio de las Naciones Unidas (ONU) sobre violencia de género reveló que el año pasado fueron asesinadas 87 mil mujeres en todo el mundo, de estas, el 58% fueron matadas por sus parejas o por los propios familiares. En dominicana se produjeron varias muertes de madres, hermanas e hijas a manos de parientes cercanos en hechos sucedidos en Santo Domingo, Santiago, Nagua, entre otras ciudades.
La investigación de violencia de género de la ONU demuestra que en el mundo el lugar más peligroso para una mujer es su propia casa. El sentido de posesión, los celos o el temor por ser abandonadas son motivaciones que conllevan a los agresores a cometer feminicidios.
En la República Dominicana las cifras de mujeres, niñas y niños víctimas de la violencia de género e intrafamiliar aumentan y son cada vez más dramáticas sus manifestaciones. Los feminicidios, mal contados, se sitúan por encima del 53% de los crímenes registrados.
La Procuraduría General de la República estima que en 2019 en el país se produjeron 114 asesinatos de mujeres, de los cuales 66 fueron feminicidios, una cifra que desgarra el alma no sólo de los familiares de las víctimas, sino de la población que ansía una sociedad más justa y segura.
Las feministas dominicanas han tomado acción contra estas injusticias realizando jornadas educativas, exigiendo al Gobierno frenar los crimines y la violencia con planes y medidas concretas, ha presentado iniciativas legislativas como la Ley sobre las causales del Aborto, realizado plantones, entre otras demandas por la igualdad de las mujeres.
Es urgente la intervención del Estado con el establecimiento de políticas públicas, de diseño de estrategias educativas, especialmente concebidas para los hombres, sobre el conocimiento de su fisiología; de promoción del respeto a la dignidad humana; de valores morales y éticos, de responsabilidad y de justicia ante las mujeres, los niños, las niñas y adolescentes, mediante la estructuración de un sistema de enseñanza que enaltezca la pareja humana como el centro del hacer y el quehacer social.

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