¿Les digo algo?

¿Les digo algo?

Nexcy D´León

Lucen retorcidas y ridículas las posiciones de muchos comunicadores, políticos e influenciadores de redes socialesen torno a la situación creada en Venezuela con las elecciones de junio de las que se proclaman ganadores Nicolás Maduro y Alfonso González Urrutia. El forcejeo por el poder en ese país es fácil de entender si se es consciente de que los amos del mundo siempre han pretendido las riquezas de los países del “tercer mundo” por lo que han querido prohibirles decidir su propio destino. En el rejuego de intereses de la sociedad actual, personas de todas las culturas y condiciones se encuentran bajo el influjo de medios y redes de comunicación que condicionan la forma de opinar e interpretar los hechos, a partir de informaciones intencionalmente falseadas y sin el conocimiento que les permita formular un juicio razonable sobre la realidad y su contexto, contribuyendo a crear mayor confusión alrededor de cualquier acontecimiento.

Los países y territorios antillanos, centro y suramericanos, desde tiempos remotos han debido enfrentarse a los europeos y los norteamericanos que consideran a sus pueblos inferiores y a sus recursos naturales como propios. Históricamente, las potencias que se asumen dueñas del mundo declaran peligro a la democracia cuando en un país tercermundista surge un proceso de defensa de sus recursos y sus derechos y satanizan a las personas que defienden la soberanía de sus naciones.
Ante la inversión de valores por la que el mundo anda al revés es necesario asumir posiciones que conduzcan a construir una sociedad y un mundo mejor y diáfano basado en la verdad.

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