Los congresistas dicen se prepara proyecto de ley y PN debe actuar
Las muertes por alcohol adulterado han preocupado a los congresistas Virgilio Cedano y Amado Díaz que ayer expresaron se prepara un proyecto de ley que castigará hasta con 10 años de prisión a los involucrados y que fácilmente la Policía Nacional puede dar con sus fabricantes y quienes lo comercializan.
Virgilio Cedano, senador por la provincia La Altagracia, lamentó las más de 35 muertes por la ingesta de alcohol adulterado que hasta el momento se han producido, y explicó algunos detalles del Proyecto de Ley de Expendio, Distribución y Consumo Responsable de Alcohol, que es propuesto por el senador de El Seibo, Santiago Zorrilla.
“Es una gran irresponsabilidad social de quienes lo fabrican y lo venden. Serán castigados no solo con un número de salarios mínimos, sino también con penas que llevan 2 a cinco años e incluso hasta 10 años de prisión en algunos casos”, dijo Cedano, quien preside en el Senado la Comisión Permanente de Interior y Policía y Seguridad Ciudadana.
El senador del Partido Fuerza del Pueblo advirtió que éste tema del consumo de alcohol en la sociedad está muy ligado a la seguridad ciudadana y que para el presidente de la República, Luis Abinader, y Ministerio de Interior y Policía, es una prioridad enfrentarlo con medidas importantes a corto plazo.
“No sólo es la delincuencia, sino también el control de las bebidas, que son las responsables del 80 por ciento de los accidentes de tránsito, sin mencionar el daño que provoca a la salud”, indicó Cedano.
Según el congresista y reputado médico, la regulación de las bebidas alcohólicas en general tendrá una importante repercusión en los hospitales en la disminución de la cantidad de traumas por accidentes de tránsito que son atendidos y que tanto le cuesta al Estado.
Habla Amado Díaz. Mientras que el diputado del Partido Revolucionario Moderno (PRM) por Santo Domingo Este, consideró que es una labor que compete a las autoridades policiales el desmantelamiento de las fábricas de alcohol adulterado, que sigue cobrando vidas de ciudadanos.
“Cuando un policía tiene 15 días o un mes en un barrio sabe todo lo que ocurre en ese barrio”, dijo el legislador.
Amado Díaz aseguró que en el país todo el mundo sabe dónde se venden esas bebidas y no cree que sea difícil apresar y someter a la justicia tanto a fabricantes como a vendedores de dichas bebidas mortales.
Consideró que para dar con los falsificadores del alcohol en el país, los cuerpos investigativos policiales no deben requerir de tanta investigación, para que sean contrarrestados en este resurgimiento que han experimentado en las últimas semanas.