El sector unido de la construcción planteó ayer su posición institucional en torno a la Ley 6-86 que creó el Fondo de Pensiones de los Trabajadores de la Construcción (Fopetcons), la cual consideran tiene aspectos inconstitucionales que perjudican a sus afiliados.

Plantearon que hay falta de transparencia con el manejo de los recursos recaudados a través de la referida legislación, los cuales son manejados por particulares cuando deberían ser administrados por la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), pero en la práctica están siendo manejados directamente por el Fopetcons, al margen de los controles públicos legales.

Señalaron las múltiples violaciones a los preceptos constitucionales, entre los cuales se destacan: violación del principio de finalidad del impuesto (el impuesto existe para sufragar cargas públicas y el Fopetcons no es una carga pública); también el principio de la razonabilidad; el principio de igualdad de todos ante la ley y el principio de prohibición de doble tributación.

Hasta el momento estos miembros del sector de la construcción dijeron desconocer el monto total de los fondos de pensiones que existen, pero entienden que deben ser cuantiosos.

Atribuyen esto a que desde el año 1986 la ley contempla que se debe destinar el 1% sobre el valor de todas las obras construidas en el territorio nacional, incluyendo las del Estado, para la creación de un fondo común de servicios sociales para las pensiones y jubilaciones de los trabajadores sindicalizados del área de la construcción y todas sus ramas afines.

Explicaron que la Superintendencia de Pensiones, la Dirección General de Impuestos Internos y la Contraloría General de la República no tienen el conocimiento sobre el manejo de estos fondos durante los 28 años que tiene de promulgada la ley.

Revelaron que el sector unido de la construcción solicitó hace seis años al Fopetcons una certificación del recurso acumulado pero hasta el día de hoy no han recibido respuesta.

Informaron que hasta el momento solo han sido pensionado alrededor de 2 mil obreros de la construcción.