BáVARO,  PUNTA CANA.  Las debilidades de la Ley de Turismo  541, de 1962, para enfrentar el problema de la arrabalización en los polos turísticos fueron planteadas en un encuentro que sostuvieron en Bávaro el Ministerio de Turismo, la Policía Turística y la Gobernación provincial, con la participación de comerciantes y turoperadores de la zona.

Se indicó  que esa ley no establece sanciones importantes para los infractores, lo que provoca que estos reincidan en prácticas ilegales.

Elizabeth Rijo dijo que es una ley correccional que establece de uno a cinco días de prisión.

Exhortó a todos los sectores a trabajar juntos para lograr la desarrabalización del destino y garantizar la seguridad ciudadana, ante las denuncias de irregularidades, piratería y negocios que funcionan sin cumplir ningún tipo de regulación.

Los sectores explicaron cómo afecta negativamente al destino el problema de la arrabalización de la costa de Bávaro, provocada por los vendedores ilegales, las embarcaciones que operan sin permiso y sin seguro de responsabilidad civil poniendo en riesgo la seguridad de los turistas; la sobrepoblación de embarcaciones y el daño humano que se está haciendo al arrecife.