ST. LOUIS, EEUU, (AFP) – El alegre regreso de un niño desaparecido en Estados Unidos generó muchas preguntas este domingo sobre qué ocurrió durante los cuatro años que permaneció en cautiverio en manos de un extraño.

Shawn Hornbeck, de 15 años, fue secuestrado en 2002 cuando montaba su bicicleta en Missouri (centro) y fue retenido, según los fiscales, en un apartamento en las afueras de St. Louis.

El niño fue hallado el viernes cuando la policía buscaba a otro niño, Ben Ownby, de 13 años, que desapareció el lunes cuando volvía de la escuela.

En una conferencia de prensa el sábado en el auditorio de una escuela primaria decorada con globos, la madre de Hornbeck, Pam Akers, dijo que su niño, de 11 años al momento del secuestro, “ha crecido más que yo”, y agregó que “hay mucho que ponernos al día”.

“Todavía siento que estoy en un sueño, sólo que esta vez es un buen sueño, no la pesadilla que he vivido por cuatro años y medio”, dijo.

Los niños no hablaron durante la conferencia de prensa, dejando en misterio lo que pasó durante su cautiverio. “Eso ocurrirá en su momento”, dijo el padrastro de Shawn, Craig Akers. “Si no quiere discutirlo, no lo haremos”.

Michael Devlin, de 41 años, fue detenido por el cargo de secuestro en primer grado en relación con el plagio de Owen, dijo la policía. Sin embargo, Devlin no ha sido acusado por el secuestro de Hornbeck, aunque las autoridades dijeron que se esperan más cargos en su contra.

Los dos niños fueron examinados en el Cardinal Glennon Children’s Medical Center de St. Louis antes de regresar a sus respectivas casas.

Devlin, gerente de una pizzería, dijo a sus vecinos que el niño era su hijo. El adolescente usó el nombre de Shawn Devlin, y montaba bicicleta afuera del apartamento, dijo un niño vecino, Tony Douglas, a Fox News.

La madre de Douglas, Rita Lederle, dijo tratar a Shawn como un hijo.

“Me sentía muy cercana a él, como una madre”, dijo Lederle a Fox. “Lo siento por los padres, no sabía que estuvo lejos de ellos por cuatro años”.

“De haber sabido, hubiera contactado a los padres de alguna manera”, agregó.

Otra vecina, Cynthia Dixon, de 54 años, dijo que Shawn “no parecía deprimido ni nada”. Declaró al diario Los Angeles Times que “pudo haber venido a cualquier adulto y decir ‘este tipo me ha secuestrado’”.

Pese a que Devlin no tiene un registro criminal, tuvo muchos encuentros con la policía, casi siempre por peleas cuando llegaba a casa y encontraba su estacionamiento ocupado.