Ginebra, Suiza. La liberación de impuestos al comercio electrónico podría beneficiar a las pequeñas y medianas empresas (Pymes), sin embargo, el gran reto es lograr que de aprobarse esa iniciativa se encuentre una solución que no tenga como consecuencia la inequidad para los establecimientos comerciales que realizan sus ventas en los mercados locales y tienen que pagar impuestos.
Así lo aseguró el embajador de Colombia ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), Eduardo Muñoz, al destacar que es uno de los temas de debate en las reuniones de los miembros de ese organismo internacional.
A juicio de Muñoz, el interés de algunos países miembros de la OMC es que no se permita gravar con impuestos las transacciones que se realizan a través de medios electrónicos, ya que por medio de esa herramienta se están facilitando operaciones que en su ausencia no se podrían hacer, especialmente las pymes.
No obstante, dijo que existen las críticas de establecimientos comerciales que venden sus productos localmente, los cuales alegan están pagando impuestos, por lo que es necesario encontrar una solución para lograr condiciones de equidad entre ambas formas de hacer negocios.
Muñoz enfatizó las oportunidades que podrían tener las pymes a través del comercio electrónico, no tan sólo en los países desarrollados, sino también en naciones en vías de desarrollo. Citó el ejemplo de una fundación colombiana que desea vender joyería internacionalmente y que piensa hacerlo a través de la internet, debido a que esa herramienta tecnológica le permite poner en circulación su catálogo de productos, con sus precios y la historia social de esa entidad.
El diplomático ofreció estas declaraciones durante su intervención en el Seminario de Información en Comercio Mundial y Desarrollo Sostenible, organizado por la Fundación Friedrich Ebert Stiftung y la OMC.