A las 2:30 de la tarde, un sonriente Karim Abu Naba’a abandonó la cárcel del Palacio de Justicia luego de que  el  Segundo Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional  le variara la medida de coerción, de dos meses de prisión preventiva a pago de una garantía económica de RD$5 millones en la modalidad de contrato, por una querella de amenaza de muerte.

El joven de origen árabe fue impedido por su padre, Mustafá Abu Naba’a, y sus abogados de hablar con la prensa. Incluso el padre   se exasperó con los periodistas que se acercaron buscando una reacción.

 Tras llegar a un acuerdo económico con la pareja de esposos Henry Báez García y Jennifer Cabrera, quienes lo acusaron porque los amenazó de muerte, la magistrada Patricia Padilla, presidenta del Segundo Juzgado de la Instrucción, varió la medida.

Sin embargo, solicitó que Abu Naba’a se presente ante el juzgado los días 15 y 30 de enero y el 4 de febrero para  el conocimiento del desestimiento de la querella.

En la audiencia, el querellante, Henry Báez, estuvo representado por su abogado Félix Damián Olivares, quien dijo que no se oponía a que se le otorgara una garantía económica al imputado, luego de expresar en el tribunal su interés de desistir de la querella.

Otra querella más.  Mientras el llamado “Príncipe”, Abu Naba’a, era dejado en libertad, el abogado Isidro Frías Castillo depositaba ante la Fiscalía del Distrito Nacional una reiteración de su querella en contra del joven  por estafa, uso de documento en blanco, abuso de confianza y amenaza de muerte contra su cliente Pedro Antonio Valdez Vizcaíno. El abogado explicó que en 2005 Valdez Vizcaíno le vendió a Karim  una yipeta Toyota Prado 2001 por RD$850,000, de los cuales el joven  le entregó  cinco mil dólares y un cheque de RD$700,000 que no tenía fondos.

Dijo que cuando su defendido le fue a reclamar a Abu Naba’a, éste rompió el cheque en pedacitos y le dijo que no le iba a dar nada. “Ya te pagué, mira ahí tu dinero”, le habría dicho a Valdez Vizcaíno mientras le tiraba los pedacitos del cheque en la cara.

El expediente depositado ayer tiene copia del cheque de una cuenta del imputado en el Banco del Progreso  fechado 21 de junio de 2005.  Valdez Vizcaíno interpuso la querella en 2005 y luego el 6 de marzo de 2007. Sin embargo, Karim salió del país y por el proceso nunca fue llevado a los tribunales, indicó el abogado.

Frías precisó  que al igual que los demás querellantes  también buscan pactar un acuerdo económico.

Pendientes. Aún queda pendiente el sometimiento por  amenaza de muerte e intento de homicidio incoado por el abogado Gustavo Mejía Ricart el pasado 26 de diciembre  en el Tercer Tribunal Colegiado del DN. La jueza Natividad Ramona Santos levantó la rebeldía y fijó para el 10 de este mes el conocimiento de medida de coerción y para el 21 de marzo el juicio de fondo.

Sobre el mismo caso en la Novena Sala Penal tiene   audiencia  el 18 de febrero, luego de que   la jueza Rosanna Vásquez Febrillet le  levantara la  rebeldía. Esa querella fue interpuesta en 2008 y  los abogados de Abu Naba’a, Gustavo de los Santos Coll y Miguel Valerio, dijeron que llegarán a juicio de fondo. 

En el Cuarto Tribunal Colegiado, donde fue interpuesta querella por la venta de un helicóptero en perjuicio de Joaquín María Flaquer,  tiene audiencia para el 30 de este mes.

En  el Quinto Juzgado de  la Instrucción está en preliminar  para conocerse el 23 de este mes  la  medida de coerción por falsificación de documentos relacionados con la compra de un Ferrari F430.

Sobre el caso, el juez Alejandro Vargas, del  Juzgado de Atención Permanente del DN,  ordenó su libertad bajo una garantía económica de RD$10 millones, por contrato. 

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Volverá a clínica. Gustavo de los Santos Coll y Miguel Valerio, abogados del joven norteamericano de origen árabe,  explicaron que Karim Abu Naba’a tras su libertad sería conducido al Centro de  Diagnóstico,  Medicina Avanzada y Telemedicina (Cedimat) adonde fue trasladado el viernes 28 de diciembre tras sufrir  un mareo en la cárcel de la Fiscalía del Distrito Nacional. Alegaron que sufre crisis nerviosa y convulsiones.