La terminación de un liceo que lleva ocho años en construcción, así como apertura de más aulas de una escuela básica, reclaman los moradores del Residencial Prados de la Caña, próximo a la entrada del municipio de Guerra, ya que sus hijos tienen que trasladarse hasta 30 kilómetros para poder recibir el pan de la enseñanza.

Para hacer el reclamo se apostaron dentro del liceo en construcción con letreros en alto para llamar la atención del presidente Luis Abinader y que este disponga la agilización de la obra construida en más de un 90 por ciento.

La doctora Ana Luisa de los Santos, de la Asociación de Padres y Amigos de la Escuela Camila Henríquez Ureña, considera que no es posible que inicie el nuevo año escolar y los estudiantes no dispongan de las aulas.

De los Santos explicó que por asuntos burocráticos y el disparo de los precios de los materiales de construcción las autoridades ahora tienen el liceo paralizado, mientras se acerca la apertura del próximo año escolar.

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“Pero ya nosotros no queremos más cuentos, nosotros lo que necesitamos es que nos entreguen el liceo para que nuestros niños no tengan que trasladarse a otras comunidades”, sostuvo.

En tanto cientos de niños de la escuela Camila Henríquez Ureña reciben docencia apiñados por falta de espacios físicos.

Ana Beato señala que en el área existen unas 10 escuelas básicas que llegan hasta al sexto grado, sin embargo, cuando terminan los estudiantes no encuentran para donde ir, por lo que muchos se ven obligados a trasladarse hasta 30 kilómetros.

Dijo que da pena observar a adolescentes parados en la carretera esperando guaguas que pasan saturadas de pasajeros en busca de un asiento para llegar a los liceos fuera de la zona, algunos ya pertenecientes a San Pedro de Macorís.

Adalberto Custodia, presidente de la junta de vecinos de la comunidad de La Caoba, reclama la terminación del liceo, ya que también sus hijos serían beneficiados.