NIZA ABAJO. San Cristóbal. En dos ranchetas de madera y zinc reciben docencia 500 estudiantes del liceo vespertino de esta comunidad, en el kilómetro siete y medio de la carretera San Cristóbal-Palenque.
En las improvisadas aulas, las pizarras y el mobiliario están en pésimas condiciones, mientras que en un solo baño los adolescentes, hembras y varones, realizan sus necesidades fisiológicas.
Cuando llueve, las aguas inundan las destartaladas infraestructuras que sirven de plantel escolar.
Asimismo, al ser el piso de tierra, cuando no es época de lluvia se levanta una polvareda que afecta el desenvolvimiento de las labores docentes, y se convierte, a su vez, en una amenaza de enfermedades.
En adición a esto, en la parte trasera del liceo se ha improvisado un vertedero, que también pone en peligro la salud de los niños, niñas y adolescentes.
El subdirector del liceo, Danilo Fructuoso, dijo que desde el año 2003 vienen reclamado la construcción de un plantel escolar, donde la población estudiantil de la comunidad reciba clases de manera digna.
Las claves
1. Un solo baño
En un solo baño los adolescentes, hembras y varones, realizan sus necesidades fisiológicas.
2. Piso de tierra
Cuando llueve, la polvareda amenaza con provocar enfermedades.