POR MANASES SEPULVEDA
El presidente del país vasco, Le Handakari José Ibarretexte, exhortó ayer al pueblo dominicano a mantener su identidad y a que nada de la globalización le  exija dejar de ser lo que es. «Sois vosotros los que tenéis que tener los objetivos y los demás podemos ayudarlos, pero no podemos sustituirlos nunca, porque el espíritu de este pueblo está en sus manos», dijo Ibarretexte al pronunciar un discurso en un acto realizado en al barrio de Las Cañitas, donde dejó inaugurado un centro para el “Proyecto Generación de Empleos de Las Cañitas”, donde asistió el secretario de Medio Ambiente, Max Puig y el Ordenador Nacional para los Fondos Europeos de Desarrollo (ONFED), Onofre Rojas.

El proyecto se inició en marzo del 2004 con Aportación Paz y Solidaridad (Gobierno País Vasco), para la generación de empleos a través de la conformación de microempresas sostenibles que ocupen jóvenes y mujeres, pare mejorar las condiciones de vida del barrio Las Cañitas.

El mandatario dijo que si el pueblo vasco deja de ser solidario, dejará de ser pueblo y ser vasco.

 «Por eso les quiero agradecer, a nombre del pueblo vasco, su trabajo aquí con ustedes, porque el trabajo que los cooperantes vascos están realizando en la República Dominicana, es un ejemplo de solidaridad de los vascos», expresó.

Señaló que cuando los vascos vienen a República Dominicana a hacer cooperación, «no vienen como tiburones», sino a compartir el futuro de los hijos, tanto vascos como dominicanos.

Señaló que si hay alguna tarea en la vida que dignifica, es fundamentalmente trabajar por los demás y que ha recibido una lección de humanidad con la visita al barrio.

Hay que globalizar un mundo más justo y condiciones dignas para vivir, dijo.

Expresó que no es posible que de seis mil millones de personas, cuatro mil quinientas viven con menos de dos dólares y que es imposible hablar de un mundo justo.

Destacó que la lengua vasca es el único rasgo cultural vivo en la historia europea.

De su lado, Puig dijo que visitaron colmados, talleres y casas, que vio a un pueblo que quiere salir adelante y que recibió a los amigos del país vasco con los brazos abiertos.

«Las Cañitas vive una situación tal que precisa de muchas cosas para salir adelante y la primera de ellas es su propia consolidación y unidad que se ha logrado por el conjunto de organizaciones”, expresó.

Dijo que ese esfuerzo necesita el respaldo y la solidaridad de otros, como se ha expresado en el Centro de Investigación y Promoción Social  (CIPROS) y en Ciudad Alternativa para concertar voluntades a favor de la transformación del barrio.

Expresó que el Gobierno Dominicano manifiesta su agradecimiento por la contribución del gobierno vasco, a favor de la República Dominicana.

De su lado, Pablo Vicente, secretario de la Coordinadora de Organizaciones para el Desarrollo de las Cañitas (CODECA), dijo que había numerosas personas, entre ellas madres solteras y jóvenes valiosos, quienes por algunas razones no estaban integrados al mercado laboral.

«Vista esa realidad, fue que solicitamos a CIPROS canalizar la posibilidad de llevar a cabo algún tipo de iniciativa que contribuya con el desarrollo de nuestro sector», expresó.

Indicó que junto a las diferentes organizaciones, CODECA realizó un diagnóstico participativo para construir una propuesta que más tarde dio sus resultados.

Explicó que el proyecto va desde la generación de empleos a través de una cooperativa de producción y servicios con cuatro microempresas, hasta generar acciones para disminuir la violencia intrafamiliar a través de un comité por los derechos de niños niñas y adolescentes.