CAMPECHE, México (AP).– Los presidentes de México, Centroamérica y Colombia comenzaron ayer, martes, una cumbre regional con el compromiso de ampliar y revitalizar el mecanismo del Plan Puebla-Panamá (PPP), como medio para contribuir a tener una América Latina más competitiva y justa.

El presidente mexicano Felipe Calderón y el primer ministro de Belice, Said Musa, inauguraron el encuentro con un llamado a sumar voluntades para superar los rezagos de la región centroamericana y así contribuir al beneficio de todo el continente.

«Los invito a que en beneficio de una América Latina próspera, más competitiva, más justa, libre y democrática, ampliemos y consolidemos el valioso instrumento de desarrollo e integración regional que hemos construido: el Plan Puebla-Panamá», dijo Calderón en el centro de convenciones de esta ciudad sureña de México.

El mandatario mexicano consideró indispensable atraer inversión a los nueve países que integran el PPP como medio para aumentar la generación de empleos y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.  Refirió que desde su creación en 2001, se han canalizado más de 4.500 millones de dólares para ejecutar 33 de los 98 proyectos pactados, entre los que destacan la construcción de redes carreteras y tendidos eléctricos.

Para llevar a la práctica los 98 proyectos se necesitan recursos por más de 8.000 millones de dólares, según su informó antes de la cumbre presidencial.

El primer ministro de Belice, país que tiene la presidencia temporal del PPP, dijo que las naciones que conforman el mecanismo tienen el reto de que «la dinámica sea más ágil y nos permita cosechar frutos más rápidamente».

Al encuentro asisten además de Calderón y Musa, los presidentes de Costa Rica, Oscar Arias; de Guatemala, Oscar Berger; de Honduras, Manuel Zelaya; de El Salvador, Tony Saca; de Panamá, Martín Torrijos; de Colombia, Alvaro Uribe, y el vicepresidente de Nicaragua, Jaime Morales.