PUERTO ESPAÑA (AP) _ Los líderes caribeños se negaron a restablecer por el momento las relaciones con Haití, suspendidas tras el derrocamiento del presidente Jean Bertrand Aristide, al considerar que persisten varias preocupaciones sobre el gobierno interino respaldado por Estados Unidos.

En una declaración emitida la noche del martes, al final de las conversaciones de dos días, los líderes de la Comunidad Caribeña, de 15 miembros, dijeron que «no hay concesiones sobre los principios fundamentales de respeto a los derechos humanos, proceso debido y buen gobierno»».

El primer ministro de Granada, Keith Mitchell, dijo a The Associated Press que el cumplimiento de esos principios «no sólo significa la celebración de elecciones democráticas, sino un alto al hostigamiento hacia la oposición política»».

Mitchell no especificó a qué se refería, pero algunos simpatizantes de Aristide se dicen perseguidos, y varios de sus ex colaboradores están en prisión, incluido el ex primer ministro Yvon Neptune, quien niega cualquier vínculo con los asesinatos durante la revuelta que llevó al derrocamiento del presidente, el 29 de febrero.

El primer ministro interino de Haití, Gerard Latortue, dijo el mes pasado que la mayoría de los caribeños apoyaba la renovación de vínculos con Haití, mientras que Guyana, Santa Lucía, y San Vicente y las Granadinas impedían que otras naciones aceptaran a su gobierno.

Las relaciones entre la Comunidad Caribeña y Haití se rompieron en marzo, cuando el gobierno interino tomó el mando y Jamaica ofreció refugio temporal a Aristide.