Primer paso. El país tomó la iniciativa de crear instituciones y aceptar recursos con el objetivo de investigar, cuantificar, conservar y aprovechar de forma racional las riquezas de nuestro mar territorial y de la zona económica exclusiva.

Sobre los hombros de Pascual Prota Henríquez recae la responsabilidad de crear la plataforma para poner a operar la Autoridad Nacional de Asuntos Marítimos, una entidad gubernamental que tiene, entre sus múltiples responsabilidades, definir los límites marítimos y velar por la investigación, conservación, y aprovechamiento de los recursos vivos y no vivos del mar, del fondo del mar y del subsuelo del fondo marino.

Todavía sin presupuesto para operar, pero con un montón de planes y estudios que pondrá en práctica, la institución que dirige, Prota Henríquez es responsable de representar interna y externamente lo relativo al mar, sus usos y derechos.

Y entre sus responsabilidades figura la realización de un catastro de recursos vivos y no vivos, renovables y no renovables, existentes en las aguas supradyacentes, suelo y subsuelo de la Zona Económica Exclusiva, así como el rescate de los tesoros de buques antiguos naufragados en esa zona exclusiva, que son considerados patrimonio cultural nacional.

¿Se tragará la rancia burocracia estatal a la Autoridad Nacional de Asuntos Marítimos para convertirlo en un organismo inoperante? ¿Proveerá el Estado dominicano los recursos necesarios para esa institución alcance el objetivo de la delimitación marítima de nuestro país, en completa armonía con las normas que rigen el Derecho del Mar Internacional, con las consecuentes características geomorfológicas, terrestres, marinas y submarinas?

Prota Henríquez irradia optimismo. Hay muchas tareas por delante. La institución está operando en el tercer nivel del edificio Sonora, en la avenida Abraham Lincoln.

El funcionario reconoce que el país no tiene definida una política marítima. Está convencido de que el país tendrá las herramientas técnicas, científicas y jurídicas para que podamos hacer un aprovechamiento sostenible de los recursos vivos y no vivos existentes en nuestros mares.

Nosotros tenemos más tierra sumergida que emergida, comenta el funcionario.

Refiere que el país no aprovecha sus recursos marítimos. Para aprovecharlos, hay que disponer de tecnología y recursos. Un dato interesante es que en nuestras aguas hay alrededor de 300 buques antiguos hundidos.

El mar es, según Prota Henríquez, el último gran recurso de la humanidad. Nuestro país no es una excepción, y por esa razón hay que aprovecharlo como una opción de desarrollo nacional. El Presidente está muy entusiasmado. Él entiende que el país debe avanzar en esa dirección.

Uno de los objetivos es colocar en la agenda el tema del mar, para que la población tenga conciencia de su importancia.

La gente piensa que el mar es para ir a bañarse y no lo ven como un gran recurso. El mar es la gran autopista del mundo, pues el 80 por ciento del comercio se produce en el mar, y todavía es la forma más barata de poder movilizar mercancías.

De forma que, por la posición geográfica de nuestro país, obtendríamos muchas ventajas marítimas.

Nosotros somos la llave entre Europa, Suramérica y Norteamérica. Debemos comenzar a vernos como un peaje de esa gran autopista. Tenemos buenos puertos, y hay que mejorarlos, pero no tenemos una flota marítima. Y hay que crearla. También hay que crear una escuela de marinos y capitanes de barco. El país debe crear los empleos del siglo 21, dice Prota Henríquez.

Concepto. Estado Archipielágico es aquel constituido totalmente por uno o varios archipiélagos y que podrá incluir otras islas.

La soberanía del Estado Archipielágico, de acuerdo al artículo 49 de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, se extiende a las aguas encerradas por las líneas de base archipelágicas y al espacio aéreo que se extiende sobre ellos, a su lecho y subsuelo y a sus recursos.

El paso inocente no se juzga suficiente para asegurar la navegación marítima internacional, por lo que las grandes naciones marítimas han reclamado un derecho más amplio, descrito como «derecho de paso inocente por las rutas marítimas archipielágicas, en condiciones similares a las del paso en tránsito por los estrechos.

El artículo 53 de la Convención del Mar dispone que los Estados Archipielágicos podrán designar vías marítimas y rutas aéreas sobre ellas, adecuadas para el paso ininterrumpido y rápido de buques y aeronaves extranjeros por o sobre sus aguas archipielágicas y el mar territorial adyacente.

Declaración. La ley 66-07, promulgada el 22 de mayo de 2007, declara la República Dominicana como Estado Archipielágico y crea la Autoridad Nacional de Asuntos Marítimos sobre la Zona Económica Exclusiva.

La nueva institución es dirigida por un órgano colegiado, integrado por:

-Un presidente designado por el Poder Ejecutivo, quien ostenta el rango de secretario de Estado. Esa función la desempeña Pascual Alberto Prota Henríquez.

-Ministerio de Industria y Comercio;

-La Autoridad Portuaria Dominicana;

-El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales;

-La Marina de Guerra.

Se creó, además, un Comité Consultivo Multisectorial con participación deliberativa en el proceso de toma de decisiones, que actuará a solicitud del presidente de la Autoridad Nacional de Asuntos Marítimos, conformado por: la Marina de Guerra, la Liga Naval Dominicana, la Universidad Autónoma de Santo Domingo, un representante de las universidades privadas, la Academia de Ciencias de la República Dominicana y un representante de las asociaciones empresariales.

Misión. Proveer al Estado Dominicano las herramientas técnicas, científicas y jurídicas necesarias para la investigación, conservación y aprovechamiento sostenible de los recursos vivos y no vivos existentes en nuestros espacios marítimos. Armonizar las políticas marítimas existentes estatales para darles coherencia y hacerlas compatibles con el Derecho Internacional vigente a fin de lograr una correcta administración oceánica y el desarrollo pleno del sector marítimo. ANAMAR es promotora del mar.

Valores

*Respeto por nuestro planeta.

*Aptitud científica.

*Visionaria.

*Proactiva

*Innovadora.

¿Somos archipiélago? El archipiélago de la República Dominicana está conformado en la parte occidental de la isla de Santo Domingo o La Hispaniola por un extenso conjunto de 150 islas menores, un elevado número de arrecifes y emersiones en bajamar, el Banco de Monte Cristi, el Banco del Pañuelo, el Banco de La Plata, Banco Innominado, el Banco de la Navidad, el Banco del Caballo, el Estrecho de la Plata, Estrecho de la Navidad, el Estrecho de Beata, el Estrecho de Alto Velo, la Gran Cordillera Submarina de Beata contigua a la Península de Barahona, otros elementos naturales y las aguas que le conectan.