En República Dominicana la temporada otoño invierno, generalmente pasa desapercibida, porque la temperatura es calurosa casi todo el año. Sin embargo, en uno que otros momentos suele sentirse un ligero friíto, lo que nos motiva a sacar de la gaveta esas frazadas guardadas o ir de tiendas en busca de ellas.
La ocasión actual es propicia para acurrucarnos y dejarnos acariciar por una cálida frazada en la textura que prefiera, y disfrutar de ese inusual ambiente que tanto gusta a este pueblo caribeño.
Los últimos días de este mes de noviembre, antesala de Navidad, cuando la temperatura llega a sus grados más bajos, los dominicanos disfrutamos de una agradable temperatura, la que según predicciones metereológicas continuará en los próximos días.
Es decir que ha llegado el momento para que haga uso de esa frazada que tiene por ahí olvidada en una gaveta, o de lo contrario compre la que mejor le convenga: de algodón mullido, lana, sintética o tela de tolla.
Ventajas de las frazadas de algodón
Esta textura resulta mucho más suave y cómoda que las demás. Además las fibras de algodón dan a las frazadas un toque de mayor suavidad, y algo muy importante: no irritan la piel. En cambio las de lana, acrílicas y fibras sintéticas, suelen irritar a algunas personas. La estructura celular de algodón esponjoso permite más fácilmente remover la humedad.
El algodón proporciona mayor calidez, porque tiene capas de aire que permanecen atrapadas entre las fibras.
Las frazadas de lana
Estas son súper duraderas, y la flexibilidad de esta fibra no es superada por ninguna, según datos de los fabricantes, debido a la elasticidad de su textura.
Las frazadas acrílicas
Éstas son mucho más asequibles que las demás en cuanto a precio, siendo posible incluso lavarlas a máquina.
En Casa Cuesta
Hay diversidad de estilos y texturas de frazadas para contrarrestar este rico friíto que actualmente disfrutamos en el país. Es cuestión de gustos y necesidad.
Las claves
1. Frazadas de algodón
Son muy suaves y duraderas. Soportan repetidas lavadas sin desgarrarse.
2. Suavidad
Al tener contacto con ésta se siente mayor suavidad que con los demás tejidos en que se elaboran las frazadas.
3. Frazadas de lana
Casi nunca se acaban y, debido a su gran flexibilidad y elasticidad superan el tiempo de duración de las demás, aunque ojo a muchas personas son alérgicas a este tipo de textura.