SAN SALVADOR (AFP).- Las fuertes lluvias asociadas a la tormenta Stan, convertida este martes en huracán en el golfo de México, habían dejado hasta este martes 39 muertos en El Salvador y miles de damnificados, 10 fallecidos en Nicaragua y tres en Guatemala, países que mantienen alerta roja.
En El Salvador el número de muertes causadas por la lluvias que caen desde el último fin de semana se incrementó en la madrugada del martes por un alud que sepultó a seis personas en el cerro San Jacinto, al sureste de la capital, informó el portavoz de los bomberos Abner Hurtado.
Otras dos víctimas fueron reportadas en la comunidad de Los Cipreses, en la carretera que conduce al aeropuerto intrnacional, 40 km al sur de la capital.
Hasta la noche del lunes, se contabilizaban 31 fallecidos a causa de las lluvias.
Según el último balance del Comité de Emergencia Nacional (Coen), el número de evacuados ascendía a 14.565 tanto por las lluvias como por la erupción del volcán de Santa Ana, que se produjo el sábado y dejó dos muertos.
El alerta roja en todo el territorio nacional incluye la suspensión de clases en las escuelas públicas y privadas.
Ante la «abrupta» erupción del volcán de Santa Ana, el gobierno mantiene asimismo alerta roja en 4.000 metros en torno al cráter del volcán y alerta amarilla Fase 2 en el resto de comunidades adyacentes al coloso.
El gobierno salvadoreño decretó el lunes el «estado de emergencia nacional», con el fin de facilitar la movilidad de recursos y solicitar la cooperación de organismos internacionales como el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
En diferentes puntos del país se registraron decenas de deslizamientos de tierra, por lo que el gobierno mantenía la recomendación de no salir a las calles, salvo emergencias.
Asimismo, se han desbordado los principales ríos del país, y decenas de comunidades, principalmente en la región costera, permanecían inundadas.
Para ayudar a los damnificados, tanto el gobierno como la empresa privada y los medios de comunicación comenzaron la recolección de víveres para ser llevados a los 94 albergues que se establecieron a nivel nacional.
Guatemala también se mantenía este martes en alerta roja ante un incremento en las lluvias asociadas al huracán, que ya habían dejado tres muertos y miles de evacuados en el país, mientras el presidente Oscar Berger visitaba algunas regiones afectadas.
De acuerdo con la información consolidada de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) hasta este martes había tres muertos y no cuatro como se informó el lunes, así como 47 heridos y 55 comunidades de la Costa Sur -sureste y suroeste- afectadas por inundaciones.
«Se han evacuado a 2.772 personas de esas comunidades, 23.200 más se han visto afectadas, existen 25.320 en riesgo, mientras que 1.689 permanecen en albergues temporales. Por aparte se tienen reportes de 872 viviendas afectadas y 1.926 en riesgo», dijo un vocero de la Conred, Benedicto Girón.
El presidente Berger y parte de su equipo de gobierno visitaban este martes las zonas afectadas para analizar qué tipo de ayuda se les puede proporcionar a los afectados por las torrenciales lluvias que caen desde el viernes.
«Estamos evaluando los daños que han causado las lluvias en muchas comunidades guatemaltecas, específicamente de la costa sur. No es necesario por el momento, declarar un Estado de Emergencia Nacional», sostuvo el mandatario.
Berger reconoció que aún no se han podido cuantificar los daños porque existen lugares en el Pacífico donde se puede ingresar sólo por lancha y aseguró que en varios municipios de los departamentos afectados se han suspendido las clases.
En Nicaragua las lluvias dejaron al menos 10 muertos, un desaparecido y 1.162 evacuados.
Ocho de los fallecidos son inmigrantes peruanos y ecuatorianos, entre ellos dos mujeres, que naufragaron a causa del mal tiempo en las playas de Jiquilillo, 250 km al noroeste de Managua, informó el oficial de Defensa Civil, mayor Porfirio Castillo.