Un estudio realizado por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo estima que en conjunto las lluvias de noviembre del 2016-abril del 2017 y los huracanes Irma y María provocaron pérdidas ascendentes a RD$49,837.41 millones, equivalentes a US$1,044.37 millones. Esta pérdida representa un 7.98% del gasto público presupuestado para 2017 y el 1.5% del PIB del 2016.
Las pérdidas en obras públicas (infraestructura vial) representaron el 56.9 por ciento del total, equivalentes a RD$28,342.61 millones (US$593.94 millones).
En segundo lugar le sigue el sector agua y alcantarillado, el cual acumuló pérdidas directas de RD$13,174.88 millones (US$276.09 millones) equivalentes al 26.4% del total para ambos eventos. Por su parte, los sectores agricultura y vivienda representaron el 10.0%, y el 4.3%, respectivamente. El resto de las pérdidas fueron registradas por otras instituciones.
Pérdidas directas estimadas por provincia. Se estima que del total de pérdidas directas provocadas por las lluvias de noviembre 2016 y abril 2017, y los huracanes Irma y María, el 13.8% se registraron en la provincia de Puerto Plata, equivalentes a unos RD$ 6,681.63 millones.
Por su parte, la provincia de Santiago registró el 11.0% de las pérdidas totales, equivalente a unos RD$5,341.53 millones. A estas provincias les siguen Monte Cristi (10.2%), Valverde (9.9%), María Trinidad Sánchez (7.9%), Espaillat (6.5%), Hato Mayor (5.3%), Duarte (5.2%) y La Vega (5.0%).
En el ámbito regional, las pérdidas directas estimadas, para ambos eventos meteorológicos tuvieron un mayor nivel de afectación en la región Norte, la cual registró el 32.1% de las pérdidas, con un monto de cerca de RD$15,883.51 millones.
La región con el segundo mayor nivel de pérdidas fue la Noroeste, con unos RD$10,429.99 millones (21.1% de las pérdidas totales). En tercer y cuarto lugares siguieron las regiones Nordeste y Norcentral.
Además, según el estudio realizado por el Mepyd hubo pérdidas indirectas causadas por los desastres naturales, entre estas las interrupciones en los servicios, y se relacionan con mayores costos o con menores ingresos. Estas son las pérdidas causadas por aquellos bienes y servicios que se dejan de vender o se encarecen como consecuencia del desastre y a los cuales se les asigna un valor monetario.
Un ejemplo de lo expuesto es que para el sector zonas francas durante los huracanes Irma y María se dejó de trabajar dos días, lo cual equivaldría a una pérdida indirecta de RD$945.28 millones, un resultado obtenido de dividir el valor agregado nominal trimestral del sector y el total de días laborables.