TAMBORIL. La comunidad tamborileña volvió a ser afectada ayer por las fuertes crecidas del río Licey por lo que unas 150 familias fueron evacuadas principalmente de la sección La Cacata, por donde pasa el río.
Mientras que la crecida del río en Gurabo afectó a tres puentes, uno de los cuales se desplomó. En la calle 20 la riada también arrastró varias casas.
En Tamboril, donde viven alrededor de 60 mil habitantes, las crecidas causaron estragos además en las principales vías de acceso al pueblo, donde las corrientes eran controladas por la Defensa Civil, los bomberos y la municipalidad. Francisco Arias, director de la Defensa Civil, informó que el entaponamiento de las alcantarillas con escombros y basura cambió el cauce del río que ocupó las vías principales y mantiene incomunicadas a varias comunidades.