Las lluvias de la semana pasada rompieron la sequía estacional y permitieron recuperar los embalses de las presas.

Las precipitaciones de la semana pasada rompieron la sequía estacional que se inició en diciembre pasado, permitiendo la recuperación de los embalses de las presas, con lo que se garantiza el abastecimiento de agua para los acueductos, la producción de alimentos y la generación de energía.

La información la dio el director ejecutivo del Insttituto Nacional de Recursos Hidráulicos (IndrhiI) Frank Rodríguez, luego de concluir la reunión del “Observatorio de la Sequía” que se realiza cada miércoles en la sede del organismo, y en el que participan las entidades que conforman el sector agua.

Mejor, pero… El funcionario dijo que si bien las lluvias crearon un escenario más favorable para que el país esté en mejores condiciones de esperar la temporada de precipitaciones, se continuará programando cada semana el uso del agua de los embalses para garantizar su aprovechamiento óptimo y evitar desabastecimientos.

Subrayó que las predicciones de la Oficina Nacional de Meteorología  para la  semana es que no se producirán lluvias de consideración, contrario al periodo del 16 al 18 de febrero pasado, cuando el país fue beneficiado con una vaguada que permitió la recuperación de la mayoría de las presas. 

Rodríguez dijo que producto de las referidas lluvias el embalse de Rincón, que estaba en niveles preocupantes, recibió una entrada de 5.07 millones de metros cúbicos, elevando su nivel en 1.09 metros, lo cual permitió su recuperación y la garantía  de agua de riego para el cultivo de arroz en su área de influencia.

La clave

 Embalses

Otros embalses que lograron su recuperación fueron los de las presas Tavera – Bao, con una entrada de 14.69 millones de metros cúbicos y un incremento de nivel de 1.44 metros; Hatillo, con una entrada de 20 millones de metros cúbicos, y el complejo Jigüey – Valdesia, al que le entraron 2.83 millones de metros cúbicos. También, Sabana Yegua, que  recibió 8.45 millones metros cúbicos y Sabaneta,  3.18 millones de metros.