POR KEVIN ALLISON
en San Francisco
Bill Gates, el presidente de Microsoft advirtió ayer que las restricciones al número de trabajadores calificados a los que se permite entrar a Estados Unidos a colocado al país en un riesgo competitivo.

Los comentarios marcaron el ataque más reciente a las políticas restrictivas a la inmigración por la industria de la tecnología, que está enfrentando escasez de trabajadores calificados aún cuando la demanda de sus capacidades se está incrementando.

Hablando ante el comité del Senado para la salud, educación, trabajo y pensiones, Gates dijo que las políticas de inmigración más rígidas de EEUU -gobernadas en parte por las preocupaciones sobre el terrorismo- están “desviando a lo mejor y más brillante del mundo precisamente cuando los necesitamos más”.

 “No tiene sentido decirle a individuos bien entrenados, altamente calificados, muchos de los cuales han sido educados en nuestros colegios y universidades más importantes, que EEUU no les da la bienvenida, ni los valora”, dijo Gates. “ A EEUU le resultará infinitamente más difícil mantener su liderazgo tecnológico si excluye a las mismas personas que son las más capaces para ayudarnos a competir”.

Gates dijo que otros países están aprovechándose de las políticas restrictivas estadounidenses acudiendo a los trabajadores altamente calificados que de otra manera elegirían estudiar, vivir y trabajar en EEUU.

 “Las oportunidades que perdemos son ganancias para ellos”, dijo. “Yo, personalmente, he sido testigo de los efectos nocivos de estas políticas casi a diario en Microsoft”.

Los comentarios de Gates sobre la inmigración forman parte de una advertencia más amplia sobre el estado de la competitividad de EEUU.

Gates dijo que sintió “una profunda ansiedad” sobre la capacidad de EEUU de mantenerse competitivo si no actúa rápido para mejorar la educación, invertir en la investigación científica y reformar sus políticas de inmigración.

 “EEUU no puede mantener su liderazgo en la innovación si no educa a innovadores de clase mundial y capacita a su fuerza de trabajo para utilizar eficazmente las innovaciones. Desgraciadamente, las cifras disponibles indican que no estamos haciendo eso […] especialmente, en nuestras escuelas de nivel medio”.

Gates llamó al congreso a distender las reglas que impiden que muchos estudiantes extranjeros se establezcan en el país una ves que completen sus estudios en EEUU. También sugirió que el Congreso acelere el proceso de obtención el status de residencia permanente para los trabajadores altamente calificados.

La reforma a la inmigración surgió como un tema clave ente los electores en las elecciones de mitad del periodo el año pasado. Sin embargo, la mayor parte del debate se ha concentrado en la inmigración ilegal y si EEUU debe crear un programa de trabajadores invitados para los inmigrantes de baja calificación.  En la actualidad, EEUU limita los visados de los trabajadores calificados a 65,000 al año, mientras que el número de tarjetas verdes, exigidas para el status de residente permanente está limitada a 140,000 al año.

Gate admitió las preocupaciones sobre la pérdida de empleos que provoca la inmigración, per trató de diferenciar entre la necesidad de estimular que trabajadores altamente calificados entre al país y el debate, más abarcador, sobre la reforma a la inmigración.

“Estas reformas no enfrentan a los trabajadores de EEUU con los nacidos en el extranjero”, dijo. “Lejos de desplazar a los trabajadores estadounidenses, los trabajadores nacidos en el extranjero de alta capacitación continuarán funcionando como siempre lo han hecho: como creadores de empleos”.

VERSION IVAN PEREZ CARRION