Lo que el Vaticano dice y calla sobre el juicio por pederastia al exnuncio, Jozef Wesolowski

Lo que el Vaticano dice y calla sobre el juicio por pederastia al exnuncio, Jozef Wesolowski

Wesolowski sigue en el hospital, dijo el Vaticano a BBC Mundo.

«Monseñor Wesolowski está mejor. Ya no se encuentra en la unidad de cuidados intensivos, aunque sigue en el hospital», es lo único que el Vaticano dice sobre el exnuncio de República Dominicana, Jozef Wesolowski.

El que fuera diplomático de la Santa Sede en el país caribeño debía acudir a la primera audiencia del juicio en su contra en un tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano el sábado, pero no se presentó.

El polaco está acusado de abusar sexualmente de menores durante los cinco años en que desempeñó el cargo en el país caribeño, entre enero de 2008 y agosto de 2013, cuando se vio obligado a dimitir.

También se le señala de posesión de material pornográfico con menores, que le fue descubierto durante su estancia en Roma antes de ser arrestado por las autoridades del Vaticano.

Pero poco antes del inicio del proceso, el promotor de Justicia -una especie de fiscal jefe del Vaticano-, el juez Gian Piero Milano explicó que Wesolowski había tenido que ser trasladado de emergencia a un hospital público.

null
Wesolowski no se presentó a la primera audiencia del juicio en su contra.

Y aunque esto no impidió la apertura del juicio, el primero por pederastia en un tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano, a los seis minutos de iniciada la audiencia el tribunal ordenó aplazar los procedimientos.

Preguntas sin respuesta

Desde entonces, BBC Mundo ha intentado saber cuál es el estado de salud de Wesolowski, cuál fue la razón por la que tuvo que ser internado, en qué hospital está, cómo procederá ahora el tribunal y si está fijada la fecha para una nueva audiencia.

Pero sólo ha logrado esclarecer la primera de las preguntas.

En cuanto a la afección por la que está hospitalizado, «son cuestiones privadas y no damos información sobre ellas», dijo tajante el vicedirector de la oficina de prensa del Vaticano, Ciro Benedettini, a BBC Mundo en una cuarta llamada.

Lo mismo contestó cuando se le preguntó sobre la clínica en la que permanece, «es información personal, privada».

«Podría decir que no está bajo vigilancia de la policía italiana», pidió Benedettini. Con ello quiso desmentir la información publicada por varios medios y atribuída a él.

¿Pero eso significa que está bajo vigilancia de la policía del Vaticano o que no está bajo vigilancia?

Esto tampoco lo quiso aclarar.

Así, BBC Mundo intentó obtener algunos datos a través de otras fuentes del microestado, como al Cuerpo de Gendarmería o policía vaticana.

Ésta remitió a la oficina de prensa del Vaticano, la que terminó insistiendo en que ya dio toda la información que podía dar.

Y sobre el futuro del juicio, recalcó que «está aplazado».

Lo que se sabe

Por lo tanto, por el momento se desconoce cuándo se seguirá con el proceso en el tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano.

«En virtud del artículo 471 del Código de Procedimiento Penal», para establecer una nueva fecha se debe «esperar el cese de la causa que ha determinado dicho aplazamiento».

Lo que sí se sabe es quiénes conforman el tribunal.

Giuseppe Dalla Torre, un jurista experto en derecho canónico y profesor de la Università di Roma Lumsa, es el presidente del tribunal, y también participan en el proceso los jueces Piero Antonio Capó, Paolo Papanti-Pelletier y, así como el juez suplente Venerando Marano.

Asimismo, el promotor de Justicia, el juez Milano, está asistido por los jueces Alessandro Diddi y Roberto Zannotti.

El abogado defensor de Wesolowski es Antonello Blasi, experto en derecho canónico y profesor de la Pontificia Universidad de Letrán (Pontificia Università Lateranense, en italiano), un centro especializado en derecho pontificio y civil situado en la extraterritorialidad vaticana de San Juan de Letrán, en Roma, y denominada por Juan Pablo II como «La Universidad del Papa».

Wesolowski ya había sido juzgado por la Congregación para la Doctrina de la Fe, el antiguo Santo Oficio.

Y bajo las reglas del derecho canónico el tribunal eclesiástico lo despojó de su estado clerical.

Sin embargo, ahora enfrenta un proceso que podría terminar en cárcel, ya que el tribunal puede dictar penas que no se limitan a la excomunión o la expulsión del sacerdocio.

Más leídas