La han querido reinventar muchas veces, adecuándola a las condiciones fuera de su territorio de origen, pero la comida mexicana tiene rasgos muy definidos, y el deseable sabor de sus más famosas recetas sólo se logra siendo fiel a su recetario básico.

Este posee una variada lista de ingredientes que se combinan para darnos platos exquisitos, más allá de tortilla rellena de carne y vegetales que cualquiera puede hacer pero no necesariamente con el auténtico sabor mexicano.

Uno de los ingredientes estrella de esta gastronomía es el maíz, cuyo cultivo es el más importante de México, con más de cuarenta variedades.

Herencia de su historia indígena, el consumo de maíz se mantiene hasta hoy cotidiano y constante, tanto que el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes de México asegura en su sitio web que los mexicanos “comemos maíz veinte veces más que el arroz, nueve veces más que el frijol y el triple que trigo”.

Allí, el pan de cada día es el maíz, que se consume fundamentalmente en tortilla, pero también en grano, tierno o maduro.

Vegetales. La cocina mexicana tiene fama de picante lo que se debe a la presencia del chile en una gran mayoría de sus recetas típicas. No hay plato mexicano en que este ají picante no se cuele: en el desayuno, comida o cena, en caramelos, helados y hasta en el agua. Y si es cierto, como se dice, que  tiene la capacidad de estimular las papilas gustativas y permitir una mejor apreciación de los sabores, pues muy justificado está su uso.

 Las variedades son muchas (poblano, pasilla, habanero, jalapeño, serrano, de árbol…) y se utilizan tanto con el ají fresco como seco para condimentar.

Otra estrella de la gastronomía de México es el jitomate, que nosotros simplemente llamamos tomate. Su jugosa pulpa se consume cruda dentro de antojos preparados con tortilla de maíz, pero también en salsas, guisos, y muchas otras preparaciones.

 En su estado verde se utiliza para dar sabor a recetas como las enchiladas y chilaquiles

Mucha importancia tienen también la cebolla y el ajo, condimentos esenciales.

El aguacate. Consumido también como ensalada y fruta, el aguacate convertido en salsa guacamole es el acompañante por excelencia de muchas recetas mexicanas.

Pero la gastronomía mexicana también utiliza las hojas de este fruto para envolver tamales y preparar carnes o guisos.

Frijoles. Mientras los frijoles son los acompañantes inseparables del arroz en nuestro país, en México se lucen con muchísimos platos, especialmente los denominados antojitos.

Los encontrará dentro de tortillas, tamales, como ingrediente principal de algunas sopas, o solos, ya sea hervidos con verduras, sofritos y en otras preparaciones.

Chocolate. Otro  ingrediente que se utiliza en esta gastronomía desde tiempos antiquísimos, y no simplemente como dulce.

Con él se prepara una gran variedad de bebidas, como el tejate (mezclado con maíz) o el chocolate atole (consumido especialmente en Navidad junto con tamales).

El chocolate juega un papel importante en la preparación de moles, que son unas salsas preparadas a partir de chile, tomate y especias.