Lo que puede aprender el PRM de la victoria de Trump

Lo que puede aprender el PRM de la victoria de Trump

Pedro René Almonte Mejía

Lo primero que debo escribir para empezar el análisis, es guardar la distancia entre la primera potencia mundial, una media isla caribeña y sus respectivas sociedades. Sin embargo, el PRM no puede hacerse el ciego en algo que está a la vista de todos. Trump es un ex presidente que lo volvió a intentar y lo consiguió. Leonel es un ex presidente que si se encuentra viable lo volverá a intentar. Entre ellos dos hay congruencias que no se pueden obviar y más sabiendo que Trump acaba de ganar.

Es obligatorio comenzar por las similitudes circunstanciales entre uno y otro. Los dos gritaron “fraude” en algún momento, y esto no sólo sirvió como desconocimiento de un resultado oficial desfavorable, si no que también pasado el tiempo, esto sirvió como una estrategia para permanecer en el imaginario del votante y venderse como una opción para sustituir a lo que está. Ambos sobrepasan ya los 70 años, y son ejemplo vivo de que la edad en política es un sofisma. Cuando se construye una marca y se mantiene en el tiempo, usted siempre será una opción, como lo pudo presenciar el mundo cuando el martes 5 de noviembre 2024, Donald Trump se puso “la ñoña” ¡otra vez!… algo que sólo se ha visto en Estados Unidos, dos veces. El primero Glover Cleveland y ahora Donald Trump. Una reelección no consecutiva. Sin embargo en nuestra media isla, Leonel  ya lo hizo una vez, Presidente 1996 y luego en 2004… ¿2028 otra vez?

Por lo tanto, ¿qué le puede ocurrir a un aspirante presidencial (ex presidente) que construyó una marca, la mantuvo y se encuentra viable con sus facultades físicas y cognitivas en buen estado? Pues lo más probable es que ocurra lo que pasó con Trump. ¡Ganó!

Sin embargo, lo antes mencionado no es suficiente para ganar, y aquí juega un papel fundamental lo circunstancial y el desempeño de que quienes gobiernan en el momento de unas elecciones. Aquí otra similitud entre ambos (Trump y Leonel). Ambos aspiran a volver (ya Trump lo logró) contra un partido que no lleva a su presidente en ejercicio como candidato, por lo cual el candidato o la candidata del PRM tendrá que cargar a cuestas con las facturas que le cobraran a la administración Abinader, sin ser el responsable real. Entre los factores claves que llevaron a Trump a la Presidencia nuevamente, están la economía (inflación, altas tasas de interés) y la inmigración ilegal… ¿adivinen? En República Dominicana también esos dos temas son los de mayor preocupación para los dominicanos.

De modo que, tendremos que ver el desempeño de la administración Abinader al cierre de su segundo mandato. Cierto es que las cosas no son como empiezan, si no como terminan; pero también es cierto que el que mal anda, mal acaba. Y el segundo mandato del Presidente Abinader no ha empezado bien. No me crean a mí, escuchen los cacerolazos.

“Nunca es tarde para cambiar de dirección si se perdió el rumbo en el camino”. Todavía hay tiempo Presidente.

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