El Boulevard de la 27 de Febrero era, una década atrás, uno de los lugares más populares de la ciudad, donde convergían personas de todas las edades y clases sociales. Sus bancos de hierro y madera fueron cómplices de grandes amores e interesantes conversaciones.
Esta plaza pública, de casi un kilómetro de largo y que nació en 1999 como un espacio primoroso y de pasatiempo, con una inversión de 68 millones de pesos, hoy tiene una lamentable apariencia de abandono.
Sí, el famoso paseo que fue ambientado con hermosos paisajes de Said Musa y las exuberantes esculturas de José Ignacio Morales El Artístico, entre ellas un gigantesco reloj, hoy en día es un lugar prácticamente abandonado que solo le sirve a los vendedores ambulantes de la zona para descansar y a los transeúntes, para pasar de un extremo a otro en la popular avenida.
Yo tengo como cinco años vendiendo aquí y hace tiempo que no veo gente visitando, sólo nosotros, los vendedores, y la gente que cruza rápido. Antes aquí se hacían fiestas, pero ya no, expresó Jacinto Hernández vendedor de golosinas en el área.
Solaz. En sus inicios, en este corredor urbano funcionaban dieciséis negocios que hacían del espacio de distracción un lugar en el que pequeños y adultos disfrutaban de la dinámica de la música, la apreciación de esculturas y de presentaciones artísticas que se organizaban las noches y los fines de semana en la mañana y las tardes para los pequeños. Ahora esos mismos locales lucen como cuevas de alimañas, y el cortinaje formado por tela de araña le da un toque tenebroso.
Añoranzas. Las noches bohemias, El boulevard ripiao, La noche nerudiana, El homenaje a René del Risco Bermúdez y a Gabriela Mistral, fueron de las propuestas artísticas que ofreció el boulevard para glorificar el folklore y la identidad dominicana.
Un reloj con pocas campanadas. Hoy las agujas de aquel gigantesco reloj ubicado en el mismo corazón del boulevard, y que se suponía eran para marcar el tiempo, se observan a lo alto estáticas. Y es que esta escultura creada por El Artístico, una de las que más resaltan por su tamaño y belleza, también es víctima del descuido.
Pelota caliente
Y sin gobernador
Desde marzo de 2008, está en trámites el traspaso de la administración del boulevard de la Secretaría de Obras Públicas al Ayuntamiento del Distrito Nacional (ADN). De acuerdo con documentos suministrados por la oficina de prensa de Obras Públicas, en fecha 25 de marzo del 2008 Roberto Salcedo, síndico del ADN, solicitó la transferencia del Boulevard con el objetivo de garantizar el adecuado mantenimiento. El 31 del mismo mes, el secretario de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, respondió al Ayuntamiento aceptando la petición.
El 14 de enero 2009 otra vez el Obras Públicas, mediante otra comunicación, reiteró al ADN su disposición de realizar las coordinaciones pertinentes para la transferencia del boulevard de la 27.