Dos religiosos franceses, una mujer y un hombre, figuran entre el grupo de al menos nueve secuestrados en Haití, capturados este domingo por miembros de la banda de los «400 Mawozo”, que lleva años sembrando el terror en esta región.

La Conferencia Episcopal francesa expresó este lunes “su gran inquietud” por ese secuestro, aunque sin aportar más detalles.

Según la prensa francesa el sacerdote procede de la región de Bretaña y la mujer del departamento de Mayenne, ambos en el noroeste de Francia.

En su comunicado, la Conferencia Episcopal francesa pide a los secuestradores que “liberen a los hombres y mujeres de paz” y que “no añadan más odio donde ya reina la pobreza y la inseguridad».

El suceso se produjo en Croix des Bouquets, a unos 20 kilómetros de Puerto Príncipe, cuando las víctimas se dirigían a la instalación de un párroco en la localidad de Ganthier, informó a Efe una fuente cercana a los religiosos.

“Los secuestradores exigen la suma de un millón de dólares estadounidenses a cambio de su liberación”, aunque actualmente se están llevando a cabo negociaciones para liberar a los secuestrados, acciones en las que participan altas autoridades estatales, según una fuente que pidió permanecer en el anonimato.

UNA DOCENA DE SECUESTRADOS

Entre el sábado y el domingo al menos una docena de personas fueron secuestradas en todo el país, entre ellos el doctor Trevant Valembrun, director médico del hospital de la red situado en Cité Militaire, en el corazón de Puerto Príncipe.

Su rapto ha llevado a la oficina central de la red de hospitales Ofatma a mantener cerradas las puertas de todos sus establecimientos desde este lunes 12 de abril hasta nuevo aviso.

“Solo las emergencias y la diálisis pueden funcionar en un caso así”, reza una nota publicada esta mañana en las redes sociales.

MEDIDAS INEFICACES

Las medidas adoptadas por las autoridades haitianas para frenar la oleada de secuestros indiscriminados no han dado los resultados esperados.

Debido a este clima de inseguridad algunas calles de la capital están vacías, pues la población teme ser víctima de un secuestro, especialmente en horas de la noche.

Incluso, algunos estudiantes han abandonado sus estudios y decenas de haitianos se han marchado del país para refugiarse en la vecina República Dominicana debido a la situación.

La violencia, los secuestros y los ataques de las bandas armadas han aumentado drásticamente en el país en los últimos tiempos, mientras las autoridades están centradas en organizar el referéndum para modificar la constitución, previsto para junio, así como las elecciones presidenciales y legislativas pautadas para septiembre.