El gobernador del Banco Central, José Lois Malkun, atribuyó ayer a sectores afectados por medidas adoptadas por esa institución la campaña de descrédito orquestada en su contra.

Rechazó que en el Banco Central haya nepotismo y que las decisiones se tomen al margen de las reglamentaciones, como publicó Diario Libre en su edición del pasado 25 de marzo.

Estimó que quienes hacen la “campaña de difamación” para dañar su imagen moral y la de su familia, utilizan los medios de comunicación porque están conscientes de que las acusaciones que hacen en su contra no tienen asidero legal.

Afirmó que las decisiones adoptadas en el Banco Central no las toma el gobernador de manera unilateral, sino que cada actividad es canalizada y estudiada por la Junta Monetaria o por comités y comisiones especiales, que son los que, en definitiva, recomiendan la solución que más conviene a la institución en cada caso.

De ahí, -señaló Malkun-, que no es cierto que en el Banco Central se impongan decisiones basadas en criterios de parentesco, amistad o filiación política para la contratación de servicios; que los lazos de consaguinidad con él aumenten las posibilidades de hacer negocios, ni que se haya relegado la transparencia, los concursos y las licitaciones.

Aseguró que más de 90% del personal del Banco Central fue contratado antes de su designación como gobernador.

Asimismo, negó que el Banco Central pueda funcionar en ocasiones como «caja chica» del gobierno ya que los mecanismos internos y normas se lo impiden.

En cuanto al subsidio que el Banco otorga para la ración alimenticia de sus empleados, Malkun señaló que esa es un práctica común en instituciones y empresas que apoyan a su personal, no obstante, informó que su administración lo eliminó y revisa la «compensación» de los alimentos en función de los aumentos de costos por la inflación de los precios.

El gobernador además defendió el apoyo financiero que dio el Banco para la Serie del Caribe, y afirmó que tuvo incidencia en el turismo dominicano.

En cuanto al aporte al Consejo Nacional para la Niñez (CONANI), Malkun dijo que se ha querido confundir a la opinión pública y que los recursos donados fueron los mismos que hasta ahora se gastaban en regalos navideños para los hijos de los empleados.

«Antes de esta administración, sólo en diciembre, en Navidad, se gastaban unos RD$18 millones en regalos del Banco Central. En el caso que se nos imputa es de RD$1 millón para la compra de juguetes que fueron distribuidos entre los niños de escasos recursos que atiende la institución CONANI, sin fines de lucro», subrayó.

En un documento, el gobernador dijo que quienes conocen su trayectoria personal y laboral de más de 40 años, tanto en instituciones nacionales como en organismos internacionales, saben que él no se presta a actos reñidos con la ley.

«Mis actuaciones y mis decisiones en el Banco Central son apegadas a la Ley Monetaria y Financiera, y a los Reglamentos de la institución; a los que pretenden manchar mi honor los reto a que lleven el caso a la justicia hasta las últimas consecuencias», dijo Malkun.

Agregó que hace ese reto a sus detractores «con la convicción de que mis actuaciones han sido diáfanas y transparentes, y pueden ser expuestas en los tribunales del país en la seguridad de que seré absuelto sin cuestionamientos de ninguna índole».

El gobernador Malkun respondió un reportaje de la periodista Kleiner López en Diario Libre, con el título «El Banco Central, del Nepotismo a la Caja Chica».