La llamada invasión de Maimón, Constanza y Estero Hondo el 14 de junio de 1959, que estremeció los cimientos de la dictadura trujillista, conjuntamente con el vil asesinato de las hermanas Mirabal, constituyeron el comienzo del fin de la oprobiosa tiranía de Trujillo, que culminó con su ajusticiamiento el 30 de mayo de 1961.

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Con apenas 8 años de edad recordamos perfectamente en Barahona el ambiente de tensión y agitación que se vivió en el país a raíz de esa temeraria y valiente acción guerrillera, de la que obtuve información confidencial de los combates que se libraban, gracias a un vecino, cuyo padrastro, un raso de la AMD apodado Coronado, se enfrentó a los revolucionarios, siendo posteriormente ascendido a sargento mayor. ¡Loor a los héroes del 14 de junio! Y un merecido reconocimiento al presidente Abinader por las condecoraciones otorgadas a los representantes de la Raza Inmortal, a la fundación de Maimón, Constanza y Estero Hondo y la Comisión Permanente de Efemérides Patrias, que dirige Juan Pablo Uribe, por resaltar la memoria histórica de esta gesta libertaria.