El Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez deploró ayer que en el país se siga hablando del narcotraficante José Figueroa Agosto, “un delincuente que debería estar en la cárcel por 200 años”.

Asimismo, consideró poca la inversión de los Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico, tomando en cuenta que esa nación registra el mayor consumo de estupefacientes. Insistió en que si no hubiera consumo masivo, no habría producción ni tráfico de drogas.

“No quiero hacerle caso a ningún delincuente que tenga a un país en jaque todo el tiempo, eso es inaceptable y protesto rabiosamente contra eso”, dijo evidentemente incómodo.

Indicó que la solución al problema del narcotráfico no consiste en dar certificados a los países, es necesario a su juicio, un mayor apoyo en recursos.

“Hace falta más recursos, no es suficiente”, señaló.

Se preguntó cómo es posible que un señor que debería estar en la cárcel se haya burlado del país y encima de eso se muestre desafiante contra las autoridades.

Declaración de Bienes.  Con respecto a la decisión de que los oficiales de la Policía Nacional declaren sus bienes, para lo cual se dio un plazo de 15 días para declarar sus bienes, el religioso la favoreció.

“El hecho de que se le pida a los policías que declaren sus bienes es algo y se podría comenzar a poner en orden la casa”, dijo el sacerdote.

Obras.  El cardenal contestó preguntas, tras la bendición de un consultorio dedicado al tratamiento y prevención del cáncer en la mujer, en sus más variadas formas.

Asimismo  bendijo una capilla, la cual lleva el nombre de Nuestra Señora de la Altagracia y está en la clínica Cruz Jiminían.

El poder del narcotráfico. Con relación al tema del narcotráfico, el fiscal del Distrito Nacional,   Alejandro Moscoso Segarra, admitió que se trata de un tipo de delincuencia que maneja muchos recursos.

Señaló que el poder económico del crimen organizado es de gran magnitud y eso no es solo en la República Dominicana.

Sin embargo, ese poder no impedirá la acción de la justicia, sostuvo el magistrado, quien  participó de la bendición e inauguración del consultorio.

Moscoso Segarra dijo que las autoridades no vacilarán en aplicar la justicia a cualquier funcionario, civil o militar que esté involucrado en el crimen organizado, sin importar el rango o posición que tenga.

Dijo que para combatir el crimen organizado, siempre es necesario tener más recursos, pero insistió que el país no se dejará impresionar por el poder de  esos sectores.

El funcionario respondió a preguntas de los periodistas en torno a la fuga del narcotraficante José Figueroa Agosto y de Sobeida Félix Morel, quienes están prófugos  con  acusaciones de  lavado y tráfico de drogas.

Se ha especulado que altos oficiales están involucrados en el caso Figueroa Agosto sin que hasta el momento haya uno arrestado o las autoridades se refierana esos rumores. 

Inauguran capilla y consultorio

En la clínica del doctor Felix  Antonio Cruz Jiminían, fueron bendecidos e inagurados un consultorio para tratar a mujeres con cáncer y una capilla dedicada a la virgen de la Altagracia.

El cardenal López Rodríguez bendijo la labor de Cruz Jiminián y la del productor de televisión Ercilio Veloz, quien reside la Fundación El Poder de la Mujer.

La Fundación El Poder de la Mujer tiene ahora un consultorio en la clínica del doctor Cruz Jiminián y esa labor fue ponderada por el cardenal López Rodríguez.

En un acto presidido por el cardenal participaron el candidato a la presidencia del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), ingeniero Miguel Vargas Maldonado y el candidato a síndico Alfredo Pacheco.

Numerosas personalidades se dieron cita a la actividad, en donde hubo elogios a la labor del cardenal y las acciones de bien de Cruz Jiminíán y Ercilio Veloz.

Entre los presentes a la bendición e inauguración de las dos áreas estuvieron el productor de televisión Freddy Beras Goico, el fiscal Moscoso Segarra, el senador de la provincia Espaillat Andrés Bautista y elprofesor Luis de León.

Tras la inauguración y bendición de las dos áreas, el cardenal visitó a los enfermos y recorrió la clínica.

A su salida, numerosas personas que se aglomeraron para participar de la actividad, pedían al cardenal que los tocara y les diera su bendición. Otras personas estuvieron ahí para acercarse a los políticos a quienes aplaudieron.