El 2 de marzo la Policía Nacional, institución responsable de garantizar la seguridad ciudadana, el mantenimiento del orden y el respeto a la ley, cumplió 82 años, ya que fue fundada ese mismo día del año 1936, mediante decreto número 1523, del Poder Ejecutivo. Hay sectores que afirman que la fecha exacta de la creación del organismo fue en 1938. El cuerpo del orden fue dirigido por primera vez por el coronel Miguel A. Román hijo. El actual incumbente (ahora se le llama director) es el mayor general Ney Aldrin Bautista Almonte, nativo de Jacagua, Santiago. Fue nombrado el 31 de agosto del año pasado.
En su proceso organizacional, la PN la han comandado oficiales superiores, coroneles, generales de brigada y mayores generales pertenecientes a las diferentes ramas militares. Bernardo Santana Páez fue el único que ostentó el rango de teniente general. El coronel Ramón Soto Echavarría, que ocupó el cargo en dos ocasiones, fue el primer oficial policial que dirigió la institución en el año 1959. Dos oficiales de la Marina de Guerra (hoy Armada Dominicana) Luis Homero Lajara Burgos (capitán de navío) y Camilo Nazir Tejada (contralmirante) también fueron jefes de la PN.
En sus más de ocho decenios de ejercicio, la institución ha tenido 62 oficiales superiores y generales militares, incluyendo nueve incumbentes que ocuparon la posición en dos oportunidades y cuatro casos de padres e hijos que han dirigido el cuerpo de orden público. El primero en ocupar dos veces la posición fue el coronel José Joaquín Coco hijo, del 2 de febrero al 5 de abril de 1938 y la segunda desde el 20 de febrero de 1940 hasta el primero de junio de 1941.
El coronel Armando Gil Pimentel estuvo en el cargo desde abril de 1938 hasta 1940 y en 1941, desde enero hasta el mes de junio; Ludovino Fernández, en un primer periodo comprendido entre el 29 de noviembre de 1943 hasta junio de 1947 y en el año 1950.
David Antonio Hart Dottin estuvo desde enero de 1956 al 1958 y desde el mes de julio de 1959 al 1960; Braulio Alvarez Sánchez ocupó la posición por primera vez en enero de 1961, en la Era de Trujillo, y en 1967, en el primer periodo gubernamental de Joaquín Balaguer (1966-70); y Rafael Guillermo Guzmán Acosta, desde septiembre de 1969 a julio de 1970 y desde abril de 1974 a mayo de 1975.
Otros titulares en dos ocasiones fueron Félix Hermida, primero en ocupar el cargo siendo oficial general, que cubrió un primer periodo entre mayo y diciembre de 1947 y desde principios de enero hasta julio de 1959; Enrique Pérez y Pérez, desde enero a diciembre de 1970 y durante un brevísimo periodo de 28 días (13 de mayo al 10 de junio de 1996) cuando apenas faltaban 72 horas para las elecciones generales en las cuales se formalizó el llamado “pacto patriótico” entre el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) y el de la Liberación Dominicana (PLD), que fueron ganadas por Leonel Fernández.
Es preciso consignar en esta nota que la primera vez que Pérez y Pérez fue nombrado en la PN, en el mismo decreto presidencial Balaguer impartió una medida sin precedentes de permitir al general “retener su condición de mayor general del Ejército, mientras desempeñe la funcional de general de brigada de la Policía”. (Ref. Brian J. Bosch, en libro Balaguer y los militares dominicanos).
Neit Nivar Seijas estuvo desde octubre de 1971 hasta diciembre de 1972 y desde mayo de 1975 a julio de 1978, periodo cuando se presentó la renuncia masiva de los jefes de los cuerpos castrenses. Otro oficial que dirigió la institución en dos ocasiones fue Ramón Soto Echavarría, en junio de 1959 y desde marzo hasta septiembre de 1967. Este oficial era el jefe de la PN cuando el atentado contra el general Antonio Imbert Barreras. Tuvo profundas diferencias con su jefe civil inmediato, el secretario de Interior y Policía, Luis Amiama Tió, que renunció al cargo. Cuatro son los casos de padres e hijos que han ocupado la jefatura policial: Ludovino Fernández, y su hijo Caonabo Fernández González, quien dirigía la institución cuando la matanza estudiantil de la calle Espaillat, en la postrimería de la muerte de Trujillo; Félix Hermida y su hijo Félix Hermida González, en el gobierno de Salvador Jorge Blanco; José de Jesús Morillo López, que comandó el cuerpo durante el gobierno provisional de Héctor García Godoy, y su hijo Nelson José, en 1968; y Rafael Guillermo Guzmán Acosta, y su hijo Rafael Guillermo Guzmán Fermín.
Ludovino Fernández fue el jefe policial que de manera individual ocupó el puesto por más largo tiempo, con tres años y medio; Máximo R. Bonetti Burgos, duró tres años y cuatro meses; Nivar Seijas, tres años y dos meses y medio; Pedro de Jesús Candelier, estuvo tres años y una semana, en el primer Gobierno de Leonel Fernández y en el de Hipólito Mejía. Dos años y 10 meses estuvo Belisario Peguero Guerrero. En noviembre de 1965 fue sustituido por el presidente del Triunvirato Donald Read Cabral, quien asumió la jefatura del cargo. Belisario, que fue reemplazo por el general Hernán Despradel Brache, fue nombrado Supervisor de la Policía con rango de subsecretario de Interior y Policía. Dos hijos de este “conflictivo” comandante, Mario y Oscar Peguero Hermida alcanzaron el rango de general y ocuparon importantes posiciones en los mandos de la institución. Dos años, siete meses y tres semanas permaneció Jaime Marte Martínez en la posición, durante el Gobierno de Hipólito Mejía. Sustituyó a Candelier.
Además de la de Pérez y Pérez, en mayo de 1996, las jefaturas más efímeras las han ocupado los oficiales Rafael Bienvenido de Castro Ortiz, 18 días, en el año 1962; Caonabo Fernández, un mes y medio, en 1961; José Joaquín Coco hijo, dos meses, en 1938; Ludovino Fernández, dos meses (en su segundo mandato de 1950), Rubén Tapia Cesse, dos mes y medio (1961), y Marcos Jorge Moreno, dos meses y tres semanas, en 1961, cuando se conocía el proceso judicial contra los conjurados en el complot contra Trujillo, que posteriormente fueron fusilados masivamente en la hacienda María, en San Cristóbal.
Otros jefes de la institución en sus 80 y tantos años de existencia son Francisco del Carmen Lluberes, Manuel Emilio Castillo, Luis Arzeno Colón, Miguel A. Casado, Virgilio García Trujillo, César Oliva García, Miguel F. Rodríguez Reyes (asesinado en Palma Sola), Federico Fiallo, Luis Montes de Oca Desangles, Manuel Secundino Pérez Peña, Luis Ney Tejeda Alvarez, Joaquín Méndez Lara (fue secretario de las Fuerzas Armadas), Robinson Brea Garó, Virgilio Payano Rojas y Paulino Reyes de León (los dos últimos en el Gobierno de Antonio Guzmán), Manuel de Jesús Tejeda Duvergé, Juan José Rodríguez Ortiz, Ramiro Matos González (fue secretario de las Fuerzas Armadas en el Gobierno de Jorge Blanco), Rafael del Socorro Payán, Rafael Antonio Tejeda Báez, José Ramón Mota Paulino, Ramón Rodríguez Arias (detuvo al expresidente Jorge Blanco en el juicio político que se le siguió), Rafael Guerrero Peralta (actual presidente del Consejo de Drogas), Luis Alberto Núñez Guzmán (La Soga), Antonio Imbert Tesson, José Aníbal Sanz Jiminián, Manuel de Jesús Pérez Sánchez, Bernardo Santana Páez y Guzmán Fermín (estos tres últimos en gobiernos de Fernández); José A. Polanco Gómez, Manuel Castro Castillo, Nelson Peguero Paredes y el actual Bautista Almonte, quien la generalidad policial identifica con su nombre de Ney o “general Bautista”.