Hoy 
El olor nos trae a la memoria miles de emociones. Esa es una de las características más grandiosas de este sentido, su poder evocador. Para que en este verano sus rincones huelan muy bien, pero sobre todo se sientan refrescantes, las notas cítricas, florales y amaderadas son las principales características de las fragancias destinadas a hacerle más llevadero estos meses de calores extremos.
Un spray hecho a base de esencia de menta es perfecto para usarlo por toda la casa ahora en verano. Levante el ánimo a toda la familia, adaptándose a las necesidades individuales, y soportando mucho mejor el calor.
A la par podrá repelar insectos y ambientar las diferentes estancias. El popurrí de hojas de menta y frutas secas es ideal para estos días de estío.
Un aroma para cada rincón. Lavanda relajante, ideal para dormir, sin dudas este aroma es el ideal para conciliar el sueño, por tanto en la habitación es perfecto para colocarlo.
En el comedor. Sobre la mesa de la cocina, se pueden hallar fragancias tan llamativas como las de Naranjas recién exprimidas o Granos de café molido.
Para la habitación de los niños nada como los apetecibles Tuttifruti y o la Banana Split dando olor a sus estanterías y juguetes; y para el dormitorio de los adultos también sugerimos Brisa marina o Madera de rosa.
La original presencia de estas fragancias aparece de distintas maneras: velas, velones sprays, esencias puras, inciensos, perfumadores de peluches o cojines perfumados.
Los aceites
Los aceites aromáticos también capturan las materias primas de los lugares más exóticos del mundo. Rosa de Bulgaria, sándalo de la India, bergamota de Túnez, lavanda de la Provenza son algunas de las esencias que se tratan en los talleres de Grasse, la cuna del perfume, pues los aceites también dan ricos aires a nuestros hogares.
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Decorar con fragancias
Las técnicas son muchas y de complejidad variable. Lo más fácil y, a la vez, decorativo, es recurrir a un cesto de mimbre o a un plato cerámico grande, que rellenaremos con aquellas plantas, flores, hojas y especias que más nos gusten. Por ejemplo: hojas de eucalipto, ramas de hierbabuena, hojas de salvia, laurel o mirto.
