Los Azulejos de Toronto demostraron el año pasado que con un poco de pitcheo pueden hacer muchas cosas.

Su rotación abridora brilló por encima de lo esperado hasta agosto y detrás de su poderosa ofensiva lograron mantenerse en la cima del béisbol.

La tropa comandada por José Bautista y Edwin Encarnación hizo lo que se esperaba en materia ofensiva, con muchos batazos y muchas carreras remolcadas.

Bautista, de hecho, tuvo una de sus temporadas más completas en las mayores al batear para .286, con 35 cuadrangulares, 103 remolcadas, 101 anotadas y un porcentaje de embasarse de .403.

Encarnación, por su lado, tuvo su segunda temporada grande con los Azulejos al empalmar 34 jonrones y remolcar 98 carreras en apenas 128 partidos antes de salir por lesión.

Reyes, mientras tanto, tuvo su primera temporada de más de 100 partidos en Toronto y bateó .287, con 30 robos, 33 dobles y 94 anotadas.

Agregaron a Justin Smoak y a Justin Donaldson, además de que firmaron por mucho dinero al receptor Russel Martin, fortaleciendo su ofensiva.

Todo eso está muy bien. Incluso, haber dejado ir a Melky Cabrera en la agencia libre podría no afectar tanto al equipo como el principal problema que afecta a esta novena: la profundidad de su pitcheo.

¿Quién sacará los outs para lograr mantener a los demás por debajo?

El nudillista R.A. Dickey sigue siendo su principal arma de pitcheo.

Pero su 14-13 y 3.71 de efectividad del 2014 no son la carta de presentación para un primer abridor de una rotación de la División Este de la Liga Americana.

Junto a Dickey, que ya tiene 40 años, aparece Mark Buehrle.

Buehrle (13-10, 3.39 y 119 ponches) tuvo una buena temporada dentro de sus estándares, pero no es un verdadero stopper.

Marcus Stroman, Drew Hutchinson y Daniel Morris están programados a completar la rotación de una organización que hizo poco durante el invierno para fortalecer su pitcheo.

Su bullpen tiene como cerrador proyectado a Brett Cecil, pero al igual que la rotación tiene algunos brazos buenos, pero nadie que cause esa gran impresión.

¿Podrán competir en el 2015?

Eso está por verse.