Sin dejar lugar a dudas, Héctor Galván ha demostrado en su corta existencia que es un escritor completo, aventajado y dichoso. Se trata de un autor completo y constante. Esta  es su séptima obra, Partida sin Retorno.

La primera fue  escrita en el año 1982, Vicios Pequeños Burgueses en la izquierda Dominicana, y generó un sisma intelectual en los medios estudiantiles y políticos.

Se trató y se trata de un estudio profundo del movimiento social en la República Dominicana. Y de las diferentes capas de ese sector de clase, adentrándose en ellas con la maestría de un cientista social escudriñando sus contradicciones, sus hábitos, así como las conductas que las caracterizan.

La publicación de esa obra constituyó una revelación así como todo un acontecimiento editorial, ya que impactó y concitó la atención de los círculos universitarios, así como  también de las peñas de intelectuales y en las discusiones de los barrios. 

Galván con este primer libro contribuyó de manera notable a enriquecer el debate en la sociedad de aquel entonces.

Aventajado, porque siendo apenas un adolecente, con tan solo 16 años, edad en la cual los jóvenes de los barrios de ese tiempo, seguían otras rutas, otras inclinaciones, luchando para mantenerse, con enormes sacrificios y triunfar en la vida, con referentes o modelos muy limitados para la época, Héctor Galván entraba en un círculo de personas que ya se preparaban para el gran relevo generacional que habría de ocurrir muchos años después.

1978 en la historia

Cuando Galván escribió Vicios Pequeño-Burgueses en la Izquierda Dominicana, en 1978, se generó un debate en los ámbitos intelectuales y académicos. La gente comenzó a promover el libro de boca en boca y muchos acudieron a La Trinitaria, lugar referencial para el libro dominicano de temática social y crítica.   

Estos tiempos eran de cambios, de convulsiones en el mundo, de advenimientos de grandes transformaciones en el ámbito social, político y económico.

En el 1978 la Organización Mundial de la Salud declara oficialmente la erradicación de la viruela en el mundo.

Said Hammani, representante y vocero oficial de la Organización de la Liberación de Palestina, organización que luchaba y lucha aún por la liberación de Palestina,  de Arafat, es asesinado en Londres.

En el mes de enero, en Nicaragua es asesinado Pedro Joaquín Chamorro, director y productor del diario La Prensa.

En el mes de Febrero, un mes más tarde, los sandinistas anuncian el inicio de la guerra civil en Nicaragua.

Hugo Banzer rompe relaciones diplomáticas con Chile por el problema de mediterraneidad de Bolivia.

El ex -primer ministro Italiano Aldo Moro es asesinado en su país, meses después  de estar secuestrado por las Brigadas Rojas.

En este año es electo el Papa Juan Pablo I.

Se firma en Camp David el acuerdo de paz entre Israel y Egipto.

Es electo el Papa Juan Pablo II, el más grande y carismático Papa de todos los tiempos, luego de grandes conflictos y conjeturas que sacudieron a la Iglesia Católica.

Mueren en Guyana más de 900 personas, todos miembros de la sectas El templo del pueblo.  Aún se conservan en las memorias las fílmicas de las personas calmadamente esperando por su toma del veneno que les arrancaría la vida.

En nuestro país se libran fuertes luchas entre dos sectores: El  que propugnaba por el mantenimiento del entonces estado de cosas, contra el sector que propugnaba por un cambio social, económico y político.  En este escenario  entró Galván en contacto con una de las mentes más brillantes del país,  el profesor Juan Bosch, convirtiéndose en un aventajado discípulo, así como quien sería su relevo casi 20 años después,  Leonel Fernández, actual Presidente de la República. Dichoso, porque la vida  lo situó en ese espacio, Galván se preparó y supo aprovechar la oportunidad que se le presentó.

Partida sin retorno

Veinticinco relatos breves forman parte del libro de cuentos “Partida sin Retorno”.

Los que como yo aman la poesía con la misma intensidad que amamos el cuento y a sus grandes cuentistas: Guy de Maupasam, Manuel Quiroga, Julio Cortazar, Juan Bosch y Gabriel García Márquez, al leer este libro de relatos seleccionados con el cuidado de un experto que toma su tiempo en estudiar la conducta humana con la clara intensión de luego exponer este comportamiento llevándolo al plano de la ficción, con el apoyo  no de personas, sino de personajes.

El éxito narrativo está en el papel que asume Galván, cual   fino tallador que  trabaja cada uno de sus personajes con visión del autor que permanece a distancia, lejos del país pero con un mundo de personas y personajes girando en su interior.

Con este libro Héctor Galván aporta un extraordinario elemento a la literatura nacional ya que se convierte en el primer crítico, estudioso y compilador de personajes, fruto de esa visión extranjera y al mismo tiempo dominicana que se manifiesta en la obra.

Invito a leer “Partida Sin Retorno”, pero sobre todo, dedicándole atención entre las tantas  narraciones que lo componen, a Amor a primera vista, más que una narración, una poesía.