Los empresarios se quejan por  altos impuestos

Los empresarios se quejan por  altos impuestos

POR JORGE RAMOS C.
A pesar de la derogación de la ley 1646 que liberó de un 22 por ciento de pago de impuestos a los espectáculos, conciertos y otras presentaciones, los empresarios artísticos coinciden en que todavía hay que revisar las cargas impositivas que afectan la diversión.

Según César Suárez, quien el pasado fin de semana presentó a Pablo Milanés y Alberto Cortez en el Teatro Nacional,  la derogación de dicha pieza legislativa fue una larga batalla que venía librando desde hace 14 años, pero que finalmente entendieron las presentes autoridades, principalmente Juan Hernández, director general de Impuestos Internos.

“En el primer período del gobierno del actual presidente Leonel Fernández, comenzamos a gestionar la eliminación de esos impuestos, el 15 por ciento de boletería  y el 7 por ciento que iba hacia los ayuntamientos”.

Precisó que al llegar a la presidencia Hipólito Mejía en el 2000, las posibilidades se detuvieron, pero en esta segunda parte del gobierno de Fernández por fin se pudo hacer realidad la eliminación de tales cargas, algo que agradece a Juan Hernández y demás funcionarios de la Dirección General de Impuestos Internos por el apoyo.

SIGUEN ALTOS

Para el joven empresario Saymond Díaz todavía siguen altos los impuestos que tienen que pagar por concepto de la presentación de artistas y espectáculos en distintos escenarios del país, a pesar del 22 por ciento menos.

“Si se compara con otros países, nos damos cuenta que aquí son exageradamente altas estas cargas, algunas de las cuales no tienen nada que ver con Impuestos Internos”, expresó Díaz.

Saludó que por lo menos se haya liberado algo, pero hay que flexibilizar más,  especialmente en lo que tiene que ver con los ayuntamientos y derecho de autor.

CONTROL DE  HORARIOS

Con relación a los controles de horario para el expendio de bebidas alcohólicas,   impuesto por la Secretaría de Estado de Interior y Policía, César Suárez dijo que a su empresa no le afectan tales controles, debido a que la mayoría de los artistas que trae al país los presenta en el Teatro Nacional.

“Salvo algunas excepciones, los conciertos que monto terminan a las 11:00, 11:30 de la noche, además de que en esa sala no se permite la ingesta de bebidas de ningún tipo”. Las declaraciones de Suárez coincidieron con las de Saymond Díaz, quien señaló que sus shows finalizan antes de la medianoche y si se trata de fin de semana, todavía a la gente le quedarían dos horas para trasladarse a divertirse.

De otro lado el cantante Sergio Vargas se ha convertido en un abanderado para que las autoridades revisen la medida del control de horarios.

 El merenguero y diputado al Congreso Nacional por su nativa Villa Altagracia, aprovecha cada una de sus fiestas para lanzar sugerencias a las autoridades sobre la imposición que tiene la finalidad  de reducir la delincuencia en el país, a pesar de que los resultados no han sido los más favorables.

Vargas no está de acuerdo con que eliminen por completo dichos controles, sino que se le agreguen dos horas más, hasta las 2:00 de domingo a jueves, y hasta las 4:00 los días viernes y sábado.

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