El aumento de la temperatura global comienza a causar una serie de cambios muy importantes en todo el mundo. El cambio climático afecta ya a millones de personas, ecosistemas y especies en todo el mundo, pero si no se hace nada al respecto, provocará mayores impactos y más severos.
En ese sentido, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha instado a los países a actuar sin dilación para frenar las consecuencias del cambio climático. “Los efectos del calentamiento se están manifestando más rápido de lo que se preveía y si no se toman medidas de inmediato puede ser demasiado tarde”.
Este es uno de los mensajes principales del informe “Previsión Medioambiental Global” (GEO-6, en inglés), presentado por el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en Nairobi (Kenia), a finales del año pasado.
El GEO-6, considerado el informe actual más completo de la materia, intenta proporcionar información científica detallada que sirva para la implementación de nuevas políticas, ha publicado los estragos más relevantes que provoca el calentamiento global, como desastres naturales: huracanes, terremotos y tormentas, más fuertes y frecuentes.
Advierte que el derretimiento de los polos, causado por el aumento del clima, produce el aumento del nivel del mar, alterando la estabilidad de los ecosistemas acuáticos y costeros, promoviendo las inundaciones de zonas costeras y su inevitable fusión a las saladas aguas marinas.
De este último informe sobre el cambio climático publicado por Naciones Unidas se pueden extraer los principales efectos nefastos para los seres vivos causados por la alteración del clima:
1. Lo primero que advierte el GEO-6 es que los países pobres, en particular aquellos en vías de desarrollo y cerca de los trópicos, así como las poblaciones pobres y vulnerables de países ricos, son los más propensos a sufrir las consecuencias más graves del cambio climático. No sólo eso, sino que el calentamiento global será un obstáculo añadido para escapar de la pobreza, aumentando la inseguridad alimentaria.
2. El cambio climático ya está afectando negativamente el rendimiento de los cultivos, y esta tendencia probablemente continuará. El calentamiento global provocará una gran reducción de la producción de alimentos y dificultará su abastecimiento en muchas regiones del mundo.
3. El calentamiento global y la consecuente pérdida de masa de glaciares y casquetes polares ocasionará una subida del nivel de mar de 15 a 95 centímetros para el año 2100.
3. El cambio climático provoca que haya periodos de sequía más extensos, debido a que está aumentando la presión sobre el agua al modificar los patrones de lluvias, los flujos de los ríos, los niveles de los lagos, y el agua del suelo.
4. Las previsiones hablan de un aumento de la frecuencia y severidad de fenómenos como sequías, inundaciones, olas de calor y huracanes.
5. Se estima que entre el 15 y el 37 % de las especies del planeta se extinguirá, lo que favorecerá el aumento de la expansión de especies invasoras y plagas.
Entre los ecosistemas naturales en riesgo por su especial vulnerabilidad se incluyen los arrecifes coralinos, los manglares y los bosques tropicales.