Hace dos semanas tratamos el tema de los feminicidios desde dos puntos de vista y hoy deseo seguir «conversando» sobre el tema, pues es de vital importancia para la nación, ya que hemos sido testigos en los últimos meses de un aumento de estos actos dolorosos que dejan en orfandad a niños inocentes, que cercenan vidas jóvenes y en edad productiva, es decir, es en verdad un fenómeno que desgarra la sociedad. En opinión del Lic. Pedro José Vásquez, profesor de la cátedra de Psicología de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), son erróneos los criterios como se están abordando los temas de los feminicidios y suicidios en el país.
El Lic. Vásquez asegura que más que violencia de género y odio contra la mujer, considera que lo que tienen los feminicidas es depresión y trastornos de la personalidad; asegura que cada vez que se plantea el tema de los feminicidios se comete una gran falacia, se buscan las causas de muertes en la ideología machista, discriminación y odio. «No es verdad que el hombre mate por odio y machismo, hay que ver que el hombre se suicida, mata o busca que lo maten». Este es el sentir de Pedro José. Por otra parte, en una opinión contradictoria a estos juicios el doctor Luis Vergés Báez, psicólogo por igual, director del Centro de Intervención Conductual para hombres, plantea que: «los feminicidios y la violencia de género no son el resultado de patologías, sobre todo de la depresión, esos juicios es lo que se llama en ciencia una falacia lógica o conclusión sesgada que emana de los prejuicios y visión simplista como muchos profesionales ven este tema».
El Dr. Vergés señala que esta afirmación no permite ver y evaluar si hay o no una verdadera patología, lo cual es correcto tratar de identificar si existen para posteriormente hacer la intervención correspondiente. No se puede suponer la existencia de un problema como si fuera algo automático. Cuando hablamos de suicidio es un tema diferente al de los feminicidios, y por tanto responden a dinámicas diferentes. Señalando que en América Latina los países con más depresión no son los que tienen más feminicidios, caso de Cuba. El penoso liderazgo lo tienen Brasil, México y Argentina.
• En lo personal, yo comparto que debemos abocarnos a un abordaje integral del problema de los feminicidios en favor de la sociedad. Los ejemplos de cooperación, compasión y benignidad son múltiples y reiterados en la conducta humana, pero también lo son el engaño, el abuso, la mezquindad o la crueldad. La mayoría de los crímenes en todos los órdenes son cometidos por personas «normales». Por ejemplo, los psicópatas solo son el 1% de la población. ¿En qué momento y por qué actúa el feminicida? Sustento que es un problema multifactorial donde la consecución de una cultura de la paz planteada por el psiquiatra Enrique Silié se hace obligatorio. Un cambio formativo en la mentalidad del varón para lograr el respeto al nuevo rol de la mujer y su valoración social, sustentados estos juicios por su esposa, Yamira García, y tercero lo que plantea el Dr. Luis Vergés, el abocarnos a un manejo multifactorial y de responsabilidades compartidas, es la solución o el paliativo más efectivo al problema. Yo asumo que todos somos responsables por igual ante este grave y doloroso mal que existe desde la prehistoria. Es necesaria una justicia más efectiva en prevención y castigo, mayor protección a la mujer, que las políticas públicas estimulen la educación en contra de la violencia de género en todas sus variantes, tal como señala el psiquiatra y amigo el Dr. José Miguel Gómez, hasta que llegue «la nueva masculinidad del dominicano», basada en el respeto mutuo, la capacidad de convivir en armonía y con la suficiente inteligencia para hacernos entender que podemos y que debemos caminar armoniosamente juntos por la vida con amor, respeto, sin violencia, sin lastimarnos ni agredirnos.