Los funcionarios deben pensarlo

Los funcionarios deben pensarlo

FERNANDO RODRIGUEZ C.

Sanear la administración pública será mayor legado de Abinader

Ahora, cuando por primera vez en la historia de la República Dominicana se le está dando carácter a la persecución de la corrupción administrativa, los funcionarios altos y medios deben cuidar su accionar de manera que puedan rendir cuentas claras y precisas de los fondos que manejan en sus respectivas instituciones.

Sostengo que el mayor legado del presidente Luis Abinader a la nación será el saneamiento de la administración pública de manera que los dineros del Estado se manejen con la pulcritud necesaria para la satisfacción de las necesidades de un pueblo víctima tradicional del saqueo de los fondos públicos.

Abinader, hijo de un servidor público que fue ejemplo de honradez en las instituciones en las que sirvió, parece que está dispuesto a seguir sus pasos, aunque para ello se aparte del ejercicio tradicional de hacerse de la vista gorda ante los actos indecorosos de los funcionarios corruptos.

Para ello cuenta con colaboradores como el director de Contrataciones Públicas, licenciado Carlos Pimentel, quien llega al Gobierno desde la alta dirección de Participación Ciudadana y está realizando un trabajo de vigilancia y aplicación de las normas que deben regir los negocios con el Estado que beneficia al país y a la imagen del Gobierno.

También cuenta el Presidente con las ejecutorias de un Ministerio Público independiente que, al margen de parcelas políticas, está presto a someter a la Justicia a quienes, amparados en posiciones públicas o relaciones familiares de poder, se aprovechan para lucrarse de los fondos del erario.

Esto vale para los pasados y presentes funcionarios por lo que sostengo que antes de hacer lo indebido, deben pensarlo.

Funcionarios deben cuidar su accionar de manera que puedan rendir cuentas claras de los fondos que manejan