NUEVA YORK.  AP.  Simpatizantes de los derechos homosexuales llamaron el sábado un hito histórico la noticia de que la mayor potencia militar del mundo permitirá a las personas abiertamente gays integrar las fuerzas armadas, mientras los detractores decían que la medida debilitará a EU.  En Nueva York, donde vive una de las mayores comunidades homosexuales del país, la ex soldado Cassandra Melnikow, una lesbiana declarada de 28 años, vio el anuncio en una luminaria de Times Square y exclamó “íExcelente, ya era hora!”. Melnikow presidió este año la marcha por el orgullo gay de la ciudad.  “No veo qué diferencia hace (la orientación sexual) para combatir en el ejército. ¿Cuál es el problema?”, dijo Melnikow, ahora investigadora de temas de salud pública.

El presidente   Obama había prometido eliminar la prohibición en su campaña electoral en el 2008 y, tras lograr una mayoría suficiente para evitar su rechazo en el Senado, se ganó la derogación en una votación histórica.  Para cuando en 1993 el presidente Bill Clinton propuso que se autorizara a los homosexuales servir en las fuerzas armadas, la presencia de éstos en el servicio militar estaba prohibida desde la Primera Guerra Mundial. Rivales de la derogación argumentaban que las fuerzas armadas no deberían ser usadas para ampliar   derechos.