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POR DIONISIO SOLDEVILA
Los Gigantes del Cibao dominaron de manera aplastante en la serie regular del torneo de béisbol invernal dominicano.
Por eso quedaron en primera posición al combinar un equipo de sumo talento ofensivo, con gran capacidad defensiva y un pitcheo sin desperdicios.
Sin embargo, las cosas no le han salido del todo bien en la serie semifinal o Round Robin en formato de Todos contra Todos.
Pero luego de una importante victoria el pasado viernes sobre las Aguilas Cibaeñas, los Gigantes lucen inspirados y con la posibilidad de lograr el despertar que necesitan para meterse en las finales.
Para el conjunto de San Francisco de Macorís, es importante no caerse de repente, como sucedió el año pasado cuando dominaron en la vuelta regular y se quedaron fuera de las finales luego de un mal round robin.
Con una marca de 3-5 en los primeros ocho juegos del round robin, los Gigantes están esperanzados en conseguir un despertar en los próximos encuentros.
Ofensiva mejorada
Los Gigantes sufrieron un duro golpe cuando su torpedero Wilson Valdez dejó la novena para atender compromisos en el extranjero, según anunció la gerencia del club.
Pero el gerente general Eddy Toledo no se quedó de brazos cruzados y de inmediato se contrataron los servicios del torpedero Robert Andino, una ficha reconocida en los circuitos minoritarios de los Marlins de Florida.
Asimismo, se fichó a Matt Cepicky, un hombre conocedor de la liga dominicana y quien remolcó la carrera de la victoria en el partido del viernes.
Al mismo tiempo, jugadores como Nelson Cruz y Alexi Casilla siguen brindando los aportes necesarios para mantenerse como uno de los equipos más temibles en materia ofensiva.
Uno que necesita comenzar a dejarse sentir mejor es el cubano Kendry Morales, y sus dos impulsadas del pasado viernes podrían ser un indicativo de ese renacer para Morales, quien tiene un promedio de .250, aunque comparte el liderato de empujadas del equipo con seis.
Estabilizar pitcheo
Los Gigantes no han tenido demasiados fracasos en materia de pitcheo, sino más bien no han contado con la suerte que se necesita para mantenerse en pelea.
Sus abridores han hecho el trabajo, como demuestran Francisley Bueno (1-0, 1.59), Alfredo Simón (1-0, 1.86), Elizardo Ramírez (0-0, 1.50), Fabio Castro (0-0, 3.86).
Pero el relevo ha tenido problemas y es un punto que debe ser estabilizado si quieren salir adelante en lo que resta de semifinal.
Figuras como Rafael Rodríguez (18.00 efectividad), Carlos Rosa (13.43), T.J. Beam (26.47), Joel Peralta (13.50) y Aquilino López (12.26), han estropeado muchos de los buenos trabajos de la rotación abridora.
Por eso se necesita por obligación que ese relevo intermedio responda de manera adecuada, porque de lo contrario, los rivales capitalizarán de una manera dramática como lo han hecho hasta el momento.
Un tramo duro
Al verse colocados en un récord de 3-5, los Gigantes tienen que jugar un béisbol prácticamente perfecto para poder lograr su boleto hacia las finales.
Aunque la distancia del segundo lugar que ocupan los Tigres era de apenas un partido antes de comenzar la jornada sabatina, para conseguir su boleto a las finales (y de paso también a la Serie del Caribe) no será nada fácil.
Eso se debe a que para pasar a la final, generalmente, se necesitan entre 11 y 12 victorias, es decir, los Gigantes tendrían que ganar unos nueve partidos más.
Y si se considera que solo restaban 10 partidos antes de la jornada de ayer, entonces se ve claramente que el tramo será difícil para los inquilinos del estadio Julián Javier, de San Francisco de Macorís.
Pero los Gigantes tienen talento, y mucho, y por eso no se pueden descartar a pesar de su mal inicio en el round robin.
El relevo de los gigantes
Lanzador Efectividad
Rafael Rodríguez 18.00
Carlos Rosa 13.43
T.J. Beam 26.47
Joel Peralta 13.50
Aquilino López 12.26
