Los hermanos Joshua y Ben Safdie, emblemas de la nueva generación del cine neoyorquino, presentaron este jueves en Cannes «Good Time«, un trepidante filme de acción con un «delincuente» Robert Pattinson, que durante el rodaje tuvo que huir de los paparazzi en Nueva York.

Con una puesta en escena febril, una banda sonora electrónica y colores «flashy», los benjamines de la competición (33 y 31 años) electrizaron a parte del público de la Croisette con la historia de un atraco que acaba mal y una carrera a contrarreloj para que uno de los delincuentes logre huir de la cárcel.

Connie (Robert Pattinson) y su hermano Nick, discapacitado mental (el propio Ben Safdie), atracan un banco en pleno día. Todo sucede como estaba previsto hasta que la policía detecta a Nick y acaba arrestándolo.

Su hermano hace todo lo posible para rescatarlo. A lo largo de una noche de locura, Connie conocerá a un revendedor de drogas, pasará por un parque de atracciones e incluso se meterá en la casa de una abuela que vive con su nieta adolescente.

Connie es «un personaje amoral que se ve forzado de repente a cuidar» a alguien, declaró Robert Pattinson en rueda de prensa después de la proyección. La actuación de Pattinson es «la mejor de toda su carrera», según la página web IndieWire.

El actor, de 31 años, una de las estrellas más deseadas de Hollywood, que saltó a la fama por su papel de vampiro en «Twilight«, explicó que la parte más difícil del rodaje fue evitar a los fotógrafos que no paraban de perseguirlo.

«Siempre quise parecer como si fuera un actor salido de la calle», dijo, así como parte del elenco, formado por actores poco conocidos, figurantes de la calle e incluso un exconvicto.

«Como rodábamos en un estilo guerrillero, me puso muy nervioso la gente que curioseaba en el rodaje y los paparazzi que estaban por ahí», aseguró el actor, añadiendo que un maquillador le ayudó a fundirse entre la gente.

Fallos en el alma humana

Junto a Pattinson aparece la actriz Jennifer Jason Leigh, que regresa a la gran pantalla después de «Los odiosos ocho» (2015) de Quentin Tarantino.

El hecho de contar con un reparto de actores y figurantes de la calle la da una fuerza y una especial veracidad al retrato de Nueva York, sobre todo al barrio de Queens, situado frente a Manhattan.

La película también cuenta con una sofisticada banda sonora creada por el músico experimental Oneohtrix Point Never, asociado con el icono de rock Iggy Pop, cuya voz resuena al final de la película en una emocionante secuencia.

Figuras destacadas de la escena cinematográfica neoyorquina, los hermanos Safdie han realizado hasta ahora filmes que abordan los fallos en el alma humana y la noción de fracaso en la sociedad.

Después del retrato de un padre, cariñoso e irresponsable a la vez, en «Daddy Longlegs», su primer largometraje en 2009, inspirado en su progenitor, han dirigido varios filmes, entre ellos «Mad Love in New York» sobre un toxicómano.