“Los hombres representan el 40 % de tratamiento con bótox en Latinoamérica”

“Los hombres  representan  el 40 % de tratamiento con bótox en Latinoamérica”

Cada vez son más los hombres que recurren a la medicina estética para cuidar su imagen y retrasar los signos de la vejez.
El tratamiento con toxina botulínica (conocido popularmente como bótox) es uno de los más demandados por varones de todo el mundo como solución para suavizar o eliminar las arrugas de expresión que aparecen con el paso del tiempo.
En América Latina, por ejemplo, los hombres representan el 40 % de la población total que se inyecta bótox; el 60 % restante corresponde a las mujeres, afirma el dermatólogo Francisco Pérez Atamoros, quien fue el primero en trabajar con esta toxina en Latinoamérica.
El especialista sostiene que con los años, los hombres están asistiendo a someterse a procesos con bótox de forma individual, pues “antes solo iban porque las esposas los llevaban casi obligados a los centros médicos”.
“Hoy van por su propio pie, motivados por la conciencia sobre la importancia de cuidar su belleza física. Ellos llegan a los consultorios contentos y muy informados”, afirma Pérez Atamoros.
Señala que en décadas pasadas había cierto tabú con respecto a los hombres cuidarse. Ellos sentían temor a que la gente los confundiera asumiendo una predisposición gay, porque se supone que los hombres que se arreglaban mucho, tenían otras inclinaciones.
“Son solo creencias infundadas, pero que se asociaban. No se veía bien que un hombre se ponga unas botas, y a la vez se vea bien, se cuide o que vaya a un consultorio a que lo depilen, pero en la actualidad, cada día que pasa se entiende que el hecho de hacerse tratamientos estéticos no los hace ni más ni menos hombres”, manifiesta.
Añade que los tratamientos estéticos son mayormente utilizados por hombres de 45 a 50 años; aunque hay una tendencia de jóvenes entre los 25 y 28 años, sobre todo aquellos que sufren de caída de pelo.
Las zonas más solicitadas. El dermatólogo señala que los hombres piden inyectarse bótox en zonas que son frecuentes también en el caso de las mujeres.
“Pero el área que más solicitan es la parte superior: las arrugas en la frente y ésa que suele marcarse en el entrecejo. Además, a ellos les gusta inyectarse la definición de la mandíbula, para ponerla más clara y cuadrada, puesto que es una característica de masculinidad”, describe el especialista, quien estuvo en el país para impartir el curso taller “Avances en rejuvenecimiento facial no quirúrgico” a dermatólogos y cirujanos plásticos, el cual fue organizado por la empresa Skin Service Import, de Federico Astwood Tueni.
Técnicas. El doctor revela que las técnicas en los hombres son completamente diferentes a las empleadas en las mujeres.
“La cantidad y la forma como se aplica la toxina en los varones nunca será la misma a la aplicada en el rostro u otra parte del cuerpo femenino. Por ejemplo, si se le pone bótox en la frente a un señor, éste busca que las cejas le queden en línea recta, mientras que las mujeres siempre desean un efecto de cejas arqueadas”, aclara el médico mexicano.
Otros tratamientos. El doctor expresa que los hombres prefieren procedimientos rápidos, que no dejen marcas ni provoquen dolor.
“Además del bótox, ellos piden rellenos para quitar surcos, al igual que procedimientos con radiofrecuencia para quitar grasa del cuerpo”, apunta.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas