Hoy 
Los Marlins de Miami están decididos a ganar nuevamente en la División Este de la Liga Nacional… y mucho más allá.
Luego de un invierno movido, los Marlins no solo tienen un nuevo estadio y una nueva imagen sino que también cuentan con un nuevo núcleo que podría ayudarlos a conquistar el tercer campeonato en la historia de la franquicia.
La primera movida fue la contratación del venezolano Ozzie Guillén para ser el dirigente.
Luego sorprendieron al mundo al adquirir al torpedero José Reyes y lograr que sin demasiados regañadientes Hanley Ramírez se mudara a tercera base.
También obtuvieron al abridor Carlos Zambrano como una baratilla desde los Cachorros de Chicago y con su talento podría ser una pieza muy valiosa.
Y para llenar el hueco dejado por el cambio de identidad de su cerrador del 2011, Juan Carlos Oviedo (mejor conocido como Leo Núñez), se quedaron con los servicios de Heath Bell.
Hoy por hoy, los Marlins lucen como el equipo favorito de la División Este de la Liga Nacional, principalmente por la cantidad de lesiones que golpean a los Filis de Filadelfia.
En términos ofensivos, los Marlins tienen una alineación bastante interesante.
Comenzando con Reyes, quien lideró la Liga Nacional en bateo el año pasado con .337, luego aparece Emilio Bonifacio en el jardín central, Ramírez de tercero en la antesala y Giancarlo Stanton de cuarto, para darle el quinto puesto a Gaby Sánchez.
Logan Morrison, Omar Infante y John Buck completan los bates de Miami, un equipo sin desperdicios en ese sentido.
El pitcheo. Todo gira alrededor de lo que pueda o no hacer Josh Johnson con su salud. El año pasado enfrentó problemas que lo limitaron mucho.
Mark Buehrle, Ricky Nolasco, Aníbal Sánchez y Zambrano completan el paquete.
El nuevo parque de los Marlins podría celebrar en grande su inauguración.
El protagonista
Ozzie Guillén
Dirigente
Destacado. Luego de una larga y controversial estadía con los Medias Blancas de Chicago, Guillén logró un movimiento para ser dejado libre en el invierno con el fin de que firmara con los Marlins. Llega a Miami con un anillo de campeón y una fama de ser un gran manejador del talento de sus peloteros.
