Internado desde hace 12 días luego de una intervención quirúrgica, el presidente brasileño Jair Bolsonaro presentó un cuadro febril y los médicos creen que podría tener neumonía. Bolsonaro fue sometido el miércoles a una tomografía de tórax y abdomen luego de que presentara fiebre.
En un comunicado divulgado ayer las autoridades del Hospital Israelita Albert Einstein, donde Bolsonaro se recupera, indicaron que los estudios mostraron “buena evolución del cuadro intestinal y una imagen compatible con neumonía“. Debido a ese nuevo diagnóstico, fue realizado un ajuste en los medicamentos mientras el mandatario continúa recibiendo el mismo tratamiento para recuperarse de la operación de extracción de la bolsa de colostomía, realizada la semana pasada, en una compleja intervención que duró siete horas. “Cuidado con el sensacionalismo. Estamos muy bien, tranquilos y seguimos firmes“, escribió Bolsonaro en Twitter.
Bolsonaro, de 63 años, había comenzado a usar una bolsa de colostomía tras ser apuñalado en una concentración de campaña el 6 de septiembre en Juiz de Fora, en el sureste del país. Ese día sufrió una hemorragia interna y graves daños intestinales que lo obligaron a suspender la campaña.