Hoy 
POR ALTAGRACIA ORTIZ GOMEZ
Los médicos del Instituto de Seguros Sociales (IDSS) levantaron ayer el paro que con carácter indefinido, mantenían en los 23 hospitales de ese organismo estatal. La decisión se tomó tras el anuncio de la doctora Nelly Pérez, directora del IDSS, de que los médicos ya podían cobrar el salario correspondiente al pasado mes de agosto.
Los médicos también pidieron a la dirección del IDSS que cancele al contralor de la institución, señor Andrés Lockward, a quien definieron como uno de los responsables del descalabro que vive el organismo.
También responsabilizaron de la crisis, al ex director, doctor William Jana Tactuk.
El salario correspondiente al mes de agosto se pagó, por una línea de créditos que abrió el Banco de Reservas, en respuesta a una obligatoriedad del gobierno con la Ley de Seguridad Social, la 87-01.
El gobierno está en la obligación de subsidiar al IDSS, dado que al no entrar el Seguro Familiar de Salud, la red de hospitales enfrenta una difícil situación económica.
Los médicos también decidieron dar un compás de espera de un mes a la directora del IDSS, quien tiene hasta el 27 de este mes para pagar el sueldo de septiembre.
La decisión fue tomada en una asamblea del personal de los hospitales del IDSS, que se llevó a cabo en el que fuera el más importante de los centros de salud de esa red, el Salvador B. Gautier.
Los médicos explicaron a la nueva incumbente del IDSS, las condiciones en que están los hospitales.
LA SITUACION
Tal es la situación de carencia que viven los hospitales del IDSS, que los médicos se disputan por área, los útiles de cura y los medicamentos.
Los médicos narraron ayer en forma patética, que en las salas de cirugía han tenido que esperar hasta tanto los familiares de los pacientes puedan comprar hilo, medicamentos y material quirúrgico.
Unos 11,500 empleados comenzaron a cobrar el salario ayer, pero tienen ahora la incertidumbre en torno a si podrán obtener el de este mes de septiembre.
Los médicos dejaron claro que junto a su Colegio, mantendrán la lucha por evitar que se siga maltratando su dignidad como profesionales y como seres humanos.
