Londres. Los mosquitos podrían trasladar enfermedades exóticas, como el dengue y el virus del Nilo Occidental, al Reino Unido en las próximas décadas, según un informe publicado hoy por la revista británica “The Lancet».
Según los expertos de la llamada agencia de Salud Pública de Inglaterra, dependiente del Ministerio de Sanidad y asesora del Gobierno, las temperaturas cálidas registradas en los últimos tiempos en el Reino Unido, debido al cambio climático, podrían favorecer que los insectos se reproduzcan.
“Los mosquitos se desarrollan más rápido en temperaturas altas, por lo que durante un invierno suave no desaparecerán, y en verano habrá más cantidad”, señaló Jolyon Medlock, de la citada agencia y que participó en el estudio.
La agencia indicó que vigila lugares donde los mosquitos pueden dejar huevos, como los neumáticos de los coches. Según el informe, probablemente las especies originarias de Asia se han importado al Reino Unido a través del comercio mundial de neumáticos usados.
Estos neumáticos, apunta el estudio, a menudo pueden ser transportados desde grandes distancias por las autopistas, haciendo que los huevos de los mosquitos se trasladen a nuevos hábitats.
Según Medlock, si bien no se han detectado mosquitos no nativos en el Reino Unido hasta el momento, “se necesita planificar un sistema mejor para supervisar la importación de los neumáticos usados».
Sin embargo, explica el informe, esta situación no solamente ocurre en el Reino Unido ya que en algunas otras zonas de Europa los mosquitos y las garrapatas están también en aumento. Durante la última década, apunta el estudio, la malaria se ha extendido a Grecia, el virus del Nilo Occidental al este de Europa y el virus del chikungunya a Italia y Francia.
Los investigadores explicaron que el incremento de las temperaturas en el Reino Unido en el futuro podrían proporcionar las condiciones ideales para el mosquito Tigre, vector en la transmisión de enfermedades como el dengue y el chikungunya.
El clima británico ya es el adecuado para la transmisión del virus del Nilo Occidental, que se puede transferir por varios mosquitos que actualmente se encuentran en el Reino Unido, aunque hasta ahora no ha habido casos en humanos.
Los autores del estudio concluyen que es necesario evaluar los riesgos que estos mosquitos pueden tener en la salud pública y prepararse para futuros brotes.