Los móviles son una amenaza colectiva

Los móviles son una amenaza colectiva

POR ADRIÁN MICHAELS
El teléfono móvil sigue invadiendo el mundo. Si las compañías de medios y telecomunicaciones están en lo cierto, todos vamos a estar pronto viendo películas, televisión en vivo y operando las puertas de los garajes con uno. El móvil será el equipo multi-propósito universal.

Esto es particularmente cierto en Italia, en algunos sentidos, el hogar espiritual del móvil y el sitio donde muchos nuevos servicios se prueban primero. Italia es el único país donde usted puede terminar una llamada telefónica diciendo “Ciao” y no sonar presuntuoso. Los italianos no dicen “¡Ciao!”, sin embargo dicen: “¡Ciao-ciao!”, y hasta “¡Ciao-ciaco-ciao-ciao!”, casi como si no superan cuántos vienen bien.

Wireless Intelligence, el grupo de investigación, dice que la relación de conexiones telefónicas móviles por persona en Italia es mayor que cualquier otro país europeo occidental, con excepción de Luxemburgo. La “penetración móvil” es 118%, lo que significa que uno de cada cinco italianos tiene dos teléfonos. Usted puede ver todas las conexiones en los bolsillos antes de que se sienten a tomar su aperitivo.

Sin embargo, en la medida que el móvil se hace más poderoso tenemos que aprender algo de etiqueta, si es que queremos mantenernos sanos. Después de más de una década de uso común del móvil, las cortesías básicas siguen siendo comprensivamente ignoradas, como se destaca en el debate creciente sobre el uso de BlackBerries en las reuniones, o en la cama.

Quiero mucho a mis amigos y colegas, pero este es mi deseo de Año Nuevo: quiero que todos se hagan amigo de alguien llamado Adán, o Abigaíl. O Aarón. Antes de los móviles, jamás pensé que llamarse Adrián sería algún tipo de encumbramiento.

Ahora, mi nombre es con demasiado frecuencia el primero en la lista del teléfono móvil de alguien. Un móvil, o varios móviles en algún bolsillo, sin cerrar la lista de direcciones, pueden llamarme fácilmente. A media noche. Varias veces por semana.

Un colega en Madrid me envió una vez más de 300 mensajes de texto, uno tras otro. Con mucha frecuencia todo lo que oigo es un sonido raro, como si alguien estuviera caminando en la calle con el móvil en el bolsillo.

Suelen llamarme los nenes de alguien, que están jugando con los móviles de sus padres, que me dejan mensajes muy “eruditos”.

Telecom Italia anunció este mes que a partir de 2006 venderá un “kit” que puede convertir su móvil en un control remoto. Operará electrodomésticos, “Set-top” de TV y “una gran cantidad de equipos electrónicos.”.

La falta de cortesía se hará costosa. La próxima vez que usted se dé vuelta en el sofá, el móvil que tiene en el bolsillo ordenará accidentalmente una película pornográfica, le dará a su perro las píldoras vermífugas, recargará la batería de su automóvil y le llenará el refrigerador de leche.

(Versión: Iván Pérez Carrión)

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