Con el auge de los teléfonos móviles surgen muchas controversias con respecto a que si el niño o la niña deben ser dotados de estos aparatos.
El argumento más esgrimido por los padres que están a favor de esto es que de esa manera tienen una mayor comunicación con los hijos y que pueden localizarlos más fácilmente.
También hay un asunto de competencia: los demás amiguitos tienen y él o ella se sentirán discriminado/a si no tiene uno.
Antes de proceder a comprar un celular para su hijo, es bueno que los padres tomen en cuenta algunas observaciones:
Estudios realizados han demostrado que los móviles son causantes de problemas de concentración en los estudios del niño o la niña; incluso algunos niños no viven a plenitud su infancia. El móvil le crea dependencia y ansiedad.
Otro punto adverso son las radiaciones que producen los aparatos que pueden afectar el desarrollo físico.
Su los niños y las niñas pasan la mayor parte del tiempo con los padres o en el colegio no necesitan móviles, porque desde esos lugares hay comunicación de cualquier incidencia.
La edad recomendable para los móviles es 16 años y se deben establecer límites en cuanto al uso y con los gastos del mismo, incluso los chicos deben asumir parte de esa responsabilidad,es decir, que ellos contribuyan con el pago mensual de la factura.
Y recordar la importancia de compartir con los hijos tiempos de calidad, creando un clima de confianza para no sentir la necesidad de controlarles, pues aunque lleven el móvil, pueden mentir.
Los padres no deben fomentar la dependencia que crean los móviles.